jueves, noviembre 01, 2012

VIERNES 30 DE NOVIEMBRE DEL 2012.

Primera Lectura: Romanos 10:9-18

9Porque si tus labios profesan que Jesús es Señor y crees de corazón que Dios lo resucitó de la muerte, te salvarás. 10La fe interior obtiene la rehabilitación y la profesión pública obtiene la salvación, 11pues dice la Escritura: "Ninguno que crea en él quedará defraudado" (Is 28,16). 12Y ya no hay distinción entre judío y griego, porque uno mismo es el Señor de todos, generoso con todos lo que lo invocan; 13porque "todo el que invoca el nombre del Señor se salvará" (Jl 3,5).
             14Pero, ¿cómo van a invocarlo sin creer en él?, y ¿cómo van a creer sin oír hablar de él?, y ¿cómo van a oír sin uno que lo anuncie? 15y ¿cómo lo van a anunciar sin ser enviados? Según aquello de la Escritura: "Bienvenidos los que traen buenas noticias" (Is 52,7).
16 Sin embargo, no todos han respondido a la buena noticia. Mirad lo que dice Isaías:"Señor, ¿quién ha dado fe a nuestro mensaje?" (Is 53,1). 17¿Lo ves? La fe sigue al mensaje, y el mensaje es el anuncio del Mesías. 18Pero pregunto yo: ¿Será que no han oído hablar? Todo lo contrario, "a toda la tierra alcanzó su pregón y hasta los límites del orbe su lenguaje" (Sal 19,5). 


EXPLICACIÓN.


La nueva palabra es la profesión de fe, que nace del corazón (Dt 30,12-14). La fe, que es entrega a Dios en la adhesión a Jesús Mesías, obtiene la rehabilitación. La profesión pública, que es una ruptura con el pasado y un compromiso de acción, obtiene vida (Espíritu) y salvación (Is 28,16; Jl 3,5) (10-13). Jesús, a diferencia de Moisés, no ha dejado libros. Es la palabra viva de la predicación la que transmite su mensaje (Is 52,7) (14-15).

Los israelitas no sólo tenían los textos del Deuteronomio, sino que la apertura a los paganos se les había declarado explícitamente por medio de los profetas (Is 53,1), y la habían rechazado.

Salmo Responsorial: Salmo 19:8-11


8 La ley del Señor es perfecta:
devuelve el respiro;
el precepto del Señor es fiable:
instruye al ignorante;
9 los mandatos del Señor son rectos:
alegran el corazón;
la norma del Señor es límpida:
da luz a los ojos;
10 el respeto del Señor es puro:
dura para siempre;
los mandamientos del Señor son genuinos;
justos sin excepción;
11 son más valiosos que el oro,
que el metal más fino;
son más dulces que la miel 
que destila un panal.


Explicación.

19,8-11 Tercera sección. Sin transición ni introducción entre un tema nuevo. Entra la ley abriendo paso a seis sentencias de una regularidad exasperante, como materializando en lenguaje el orden que intenta establecer. Sólo sies: falta una para la perfección.
Los predicados son en gran parte corpóreos: respiración, corazón, ojos; es límpida y pura, es estable y ofrece apoyo. Es razonable, no teme dar razones y así educa al inexperto sin dejarlo en su ignorancia. Es lúcida, no exige obediencia ciega, sino que ilumina los ojos. Da alegría interna, no es carga insoportable.
El último verso propone dos coparaciones: oro, símbolo y medida de valor; miel, manjar el más sabroso (Prov 16,24). El autor piensa en el contenido más que en la formalidad de la ley.


Evangelio: Mateo 4:18-22

 18 Caminando junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos: a Simón, el llamado Pedro, y a Andrés, su hermano, que estaban echando una red de mano en el mar, pues eran pescadores.
19 Les dijo:
                  - Veníos conmigo y os haré pescadores de hombres.
                 20 Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.
                 21 Pasando adelante vio a otros dos hermanos: a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que estaban en la barca poniendo a punto las redes, con Zebedeo, su padre. Jesús los llamó.
                22 Inmediatamente dejaron la barca y a su padre y lo siguieron.

EXPLICACIÓN.

18 - 22.      Esta llamada es el paradigma de todas las demás en Mt. El mar/lago, frontera con los pueblos paganos y alusión al éxodo. La insistencia en el vínculo de hermandad (18.21) alude a Ez 47,13s, donde se anuncia el futuro reparto de la tierra a partes iguales ("cada uno como su hermano"): igualdad de todos sus seguidores. La invitación de Jesús (19) recuerda la llamada de Eliseo por parte de Elías (1 Re 19,19-21). Lo presenta como profeta e implica la comunicación de su Espíritu. Pescadores de hombres, cf. Ez 47,10. Jesús llama a una misión que pretenderá atraer a los hombres (judíos y paganos). Santiago y Juan, hermanos; presencia del padre, figura de la autoridad y de la tradición (21). En lo sucesivo no deberán reconocer más que al Padre del cielo (6,9; 23,9) (21-22).



JUEVES 29 DE NOVIEMBRE DEL 2012.

Primera Lectura: Apocalipsis 18:1-2, 21-23; 19:1-3, 9

18 1 Vi después otro ángel que bajaba del cielo; venía con gran autoridad y su resplandor iluminó la tierra.
2 Gritó a pleno pulmón:

-¡Cayó, cayó la gran Babilonia!
Se ha convertido en morada de demonios,
en guarida de todo espíritu impuro,
en guarida de todo pájaro inmundo y 
repugnante;
21 Un ángel vigoroso levantó en vilo una piedra del tamaño de una rueda de molino y la tiró al mar diciendo:

-Así, de golpe,
precipitarán a Babilonia, la gran ciudad,
y desaparecerá.
22 El son de cítaras y músicos,
de flautas y trompetas
no se oirá más en ti,
ni artífices de ningún arte
habrá más en ti,
ni murmullo de molino
se oirá más en ti,
23 ni luz de lámpara
brillará más en ti,
ni voz de novio y novia
se oirá más en ti,
porque tus comerciantes eran los magnates de la tierra
y con tus brujerías embaucaste
a todas las naciones.

19 1 Oí después en el cielo algo que recordaba el vocerío de una gran muchedumbre; cantaban:


- Aleluya.
¡ La victoria, la gloria y el poder
pertenecen a nuestro Dios,
2 porque sus sentencias son legítimas y justas!
Él ha condenado a la gran prostituta
que corrompía la tierra con su fornicación
y le ha pedido cuenta de la sangre de sus
siervos.

3 Y repitieron:

- Aleluya.
El humo de su incendio
sube por los siglos de los siglos.

9Entonces me dijo: "Escribe: Dichosos los invitados al banquete de bodas del Cordero". Y añadió: "Estas palabras verídicas son de Dios".


Explicación.

Proclamación celeste de la ruina del imperio por boca de un mensajero excepcional (gran autoridad); la presencia del ángel ilumina la tierra: alegría y esperanza (1).

Se compara la caída de Roma a la de la antigua Babilonia; Cayó, cf. 14,8; Is 21,9; Jr 51,8;morada de demonios, etc.. cf. Is 13,20s; 34,11; jr 50,39; Bar 4,35 (2).

21-24. Acción simbólica (cf. Jr 51,63; Mt 18,6) de un ángel, explicada por él mismo (21-24). La ruina destruye la vida doméstica de la gente sencilla, la fiesta, el trabajo, el cariño: el son de cítaras, etc., cf. Is 24,8; Ez 26,13 (22); ni voz de novio y novia, etc., Jr 7,34; 16,9; 25,10 (23a). Pero el imperio, con su comercio, dominaba al mundo, engañando con sus malas artes (23b)

Aclamaciones a Dios por su acción; son los últimos coros del libro. El Dios justo no ha tolerado la injusticia y ha rehabilitado a los suyos, injustamente perseguidos y condenados (1-2). De toda la gloria y opulencia anterior no queda más que el humo de la ruina definitiva (3). 

El ángel dice a Juan que escriba, para consuelo y ánimo de los cristianos, notificándole el origen divino de sus palabras (9).

Salmo Responsorial: Salmo 100:1-5


1Vitorea al Señor, tierra entera, 
2servid al Señor con alegría
entrad a su presencia aclamando.
3Sabed que el Señor es Dios,
él nos hizo y somos suyos,
pueblo suyo y ovejas de su aprisco.
4Entrad por sus puertas con acción de gracias,
por sus atrios con himnos,
dadle gracias, bendecid su nombre:
5«EI Señor es bueno, su misericordia es eterna,
su fidelidad de edad en edad».

 100 Himno con invitatorio ampliado y motivación simplificada. El invitatorio se articula en siete imperativos, de los cuales el central da contenido concreto a la alabanza. El último verso es el texto de la bendición. En un horizonte universal, de "la tierra entera" se coloca la elección de un rebaño. El contexto es cúltico, como una procesión de "entrada": "puertas, atrios, presencia".
100,2. "Servid" puede tener sentido genérico, venerar, o restringido, dar culto.
100,3. "Sabed" es imperativo raro: tiene el peso de reconocer. El complemento "nos" se estrecha al pueblo. "Nos ha hecho" físicamente por la bendición patriarcal de la fecundidad (Gn 12,2); políticamente, haciendo de una masa de esclavos una nación libre; religiosamente por la alianza.
100,5. "Bondad, fidelidad y lealtad" forman parte de la proclamación litúrgica, desde Ex 34,6 en adelante.

Trasposición cristiana.
 "Nos hizo" se puede ensanchar para que abarque a todos los hombres (Hch 17,26); se puede estrechar a la Iglesia como rebaño del buen pastor (Jn 10,12-16).
Evangelio: Lucas 21:20-28


PREDICE LA RUINA DE JERUSALÉN.

20 Cuando veáis que Jerusalén va siendo sitiada por ejércitos, sabed que está cerca su devastación.
21 Entonces, los que estén en Judea, que huyan a los montes; los que estén en la ciudad, que se alejen; los que estén en el campo, que no entren en la ciudad;
22 porque ésos son días de reivindicación en que se cumplirá todo lo que está escrito.
23 ¡Pobres las que están encinta o criando en aquellos días! Porque habrá una necesidad tremenda en la tierra y un castigo para este pueblo.
24 Caerán a filo de espada, los llevarán cautivos a todas las naciones, y Jerusalén será pisoteada por los paganos, hasta que los plazos de los paganos se cumplan.

LA CAÍDA DE LOS IMPERIOS. EL TRIUNFO DEL HIJO DEL HOMBRE.

25 Habrá señales en el sol, la luna y las estrellas, y en la tierra las naciones paganas serán presa de angustia, en vilo por el estruendo del mar y el oleaje,
26 mientras los hombres quedarán sin aliento por la temerosa expectación de lo que se le viene encima al mundo, pues las potencias del cielo vacilarán.
27 Entonces verán llegar al Hombre en una nube con gran potencia y gloria.
28 Cuando empiece a suceder esto, poneos derechos y alzad la cabeza, porque está cerca vuestra liberación.


Explicación.

(20-24) Jesús niega el segundo presupuesto de la pregunta, la aparición de una señal salvadora. Cerco de Jerusalén. Su ruina corresponde al "día del Hombre" (17,24.37; cf. 13,35; 19,27.41-44; 20,16). La destrucción llegará hasta el final (cf. v.6), la única solución es una huida lo más rápida posible (21). Son los días del desquite o de la justicia (cf. 18,1-8); todo lo escrito, cf. 11,50s (22).

Compasión de Jesús por las víctimas inocentes (23). Dispersión de los judíos y humillación de Jerusalén (cf. 13,35). Esta ruina inaugura la época de los paganos, que significa la llegada del reinado de Dios (9,27) (24).

(25-28). Acontecimientos posteriores, en contexto pagano. La caída del régimen opresor judíos, consecuencia histórica del rechazo de Jesús, será seguida por la caída sucesiva de los opresores paganos, consecuencia del rechazo y persecución contra el mensaje; vse. Mc 13,24-27; éste será el curso de la historia.

La catástrofe cósmica era símbolo de la caída de un orden social injusto (Is 13,10; 34,4; Ez 32,7s; Jl 2,10.31; 3,15), que aparece como la inauguración de un mundo diverso; las potencias del cielo, los poderes divinizados (25s).

Es el triunfo del Hombre sobre los opresores; su gran potencia de vida se opone a "las potencias" de muerte que vacilan; su gloria o realeza, a la realeza de los opresores que declina (27). Ante la ruina de un orden social injusto, que espanta a los hombres, los discípulos, cuya labor ha contribuido a esa caída, lejos de temer (cf. 21,9), han de cobrar ánimos, pues para ellos es señal de liberación (28).

MIÉRCOLES 28 DE NOVIEMBRE DEL 2012.

Primera Lectura: Apocalipsis 15:1-4

1 Vi en el cielo otra señal, magnífica y sorprendente: siete ángeles que llevaban siete plagas, las últimas, pues con ellas se agotó el furor de Dios.
2 Vi también una especie de mar de vidrio veteado de fuego; en la orilla del mar de vidrio estaban de pie los que habían triunfado de la fiera, de su estatua y de la cifra de su nombre;
3 con cítaras que Dios les había dado cantaban el cántico de Moisés el siervo de Dios y el cántico del Cordero diciendo:

- Grandes y admirables son tus obras,
Señor Dios, soberano de todo;
justo y verdadero tu proceder,
rey de las naciones.
4 ¿Quién no te respetará?,
¿quién no dará gloria a tu nombre,
si sólo tú eres snato?
Todas las naciones vendrán
a postrarse ante ti,
porque tus justas sentencias
se han promulgado.


Explicación.

El septenario de los cuencos lleva a término la salvación/liberación: nuevo éxodo (2-4); se prepara el ataque de Dios a la fiera (5-8).

Visión de una señal magnífica (lit. "grande", cf. 12,1.3), es decir, portadora de un mensaje importante y sorprendente: "siete ángeles" que llevan siete plagas (1). Este término recuerda inmediatamente la liberación de Egipto; se trata, pues, de una acción divina que derrumba el poder ejercido por un opresor sobre los que son fieles a Dios. Son las últimas; la liberación entra en su fase final; el mal va a destruirse a sí mismo (se agotó el furor de Dios; cf. nota a 11,15-19).

Segunda visión, en paralelo con la primera: un mar de cristal (cf.4,6), pero esta vez veteado de fuego, símbolo de la prueba. Es una visión anticipada de la liberación que va a efectuarse y muestra la finalidad de las plagas anunciadas. Los liberados son los que han triunfado de la fiera, etc., no por la violencia, sino por la fidelidad y la constancia, sin ceder a la persecución ni a la presión ejercida contra ellos; en la orilla del mar que ya han atravesado (2). 

Lo mismo que Moisés, después de atravesar el Mar Rojo, había entonado el cántico de acción de gracias por la liberación de Egipto (Éx 15), los que no han cedido a la fiera entonan el cántico de su éxodo, agradeciendo su liberación; soberano de todo, el Creador;rey de las naciones, no ya de Israel: universalidad (3). Admiración (¿Quién no te respetará, etc.?). Las calamidades no pretenden aniquilar a las naciones, sino curarlas de su mal, haciéndoles reconocer al verdadero Dios (4).


Salmo Responsorial: Salmo 98:1-3, 7-9

(Sal 96; Is 40-55) 
1Cantad al Señor un cántico nuevo
porque ha hecho maravillas;
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo.
2EI Señor da a conocer su victoria,
revela su justicia a la vista de los pueblos.
3Se acordó de su lealtad y fidelidad
para la Casa de Israel.
Los confines de la tierra han contemplado
la victoria de nuestro Dios.
7Retumbe el mar y cuanto contiene,
el orbe y cuantos lo habitan;
8batan palmas los ríos
aclamen juntas las montañas
9delante del Señor, que ya llega,
a regir la tierra.
Regirá el orbe con justicia,
a los pueblos con rectitud.
Explicación.
98,1 Ap 5,9; 14,3.
98,1-3 Notamos una "victoria" singular y "maravillas" plurales. La explicación está en el "recuerdo" del Señor, el cual ha sido coherente con su modo de proceder, ha mantenido su "lealtad". La acción ha sido a favor de Israel y "justa", la manifestación es universal: Israel es escenario de la actuación de Dios.
98,7-8 También los ruidos de la naturaleza pueden incorporarse a la música: véanse Is 44,23; 49,13; 55,12.
98,9 "Viene": verbo poco frecuente predicado en sentido positivo de Dios; particularmente próximo es Is 40,5.10. El verbo tiene en primer lugar un significado espacial; en hebreo adquiere también un sentido temporal: el por-venir, el tiempo venidero, el año que viene. Este significado añadido abre el salmo a una proyección escatológica.

Trasposición cristiana.
El tema del "venir" se realiza en el "adviento", en el Mesías "que ha de venir"; doble adviento, histórico y escatológico; ambos celebrados en nuestro adviento litúrgico. El segundo tema es el reinado, dominante en el NT: universal y justo. Al "cántico nuevo" se refiere Ap 5,9s.

Evangelio: Lucas 21:12-19


12 Pero antes de todo eso os perseguirán y os echarán mano, para entregaros a las sinagogas y cárceles y conduciros ante reyes y gobernadores por causa mía.
13 Tendréis en eso una prueba.
14 Ahora, haced el propósito de no preocuparos por vuestra defensa,
15 porque yo os daré palabras tan acertadas que ninguno de vuestros adversarios podrá haceros frente o contradeciros.
16 Hasta vuestros padres y hermanos, parientes y amigos, os entregarán y os harán morir a algunos.
17 Seréis odiados de todos por razón de mi persona,
18 pero no perderéis ni un pelo de la cabeza.
19 Con vuestra constancia conseguiréis la vida.


Explicación.

Pero, lo mismo que el rechazo de "el Hombre" había de proceder a la destrucción de Jerusalén, también los discípulos serán perseguidos de parte de los poderes judíos y paganos. Esto los confirmará en la verdad de su postura (cf. 6,22) (12s).

No preparar ninguna defensa, lo que equivaldría a reconocer la legitimidad del tribunal, sino esperar las palabras eficaces que se les inspiren (14s, cf. 12,11s). Serán sus connacionales judíos los que más se ensañen con ellos, pues el mensaje universalista del Reino anula el privilegio de Israel (16s). Confianza (cf. 12,7) (18). Lo importante es no cejar ante esa oposición a muerte por parte de la sociedad. La constancia garantiza la vida, como producía el fruto (8,15) (19).


MARTES 27 DE NOVIEMBRE DEL 2012.

Primera Lectura: Apocalipsis 14:14-19

14 En la visión apareció una nube blanca y, sentada encima, una figura humana con una corona de oro en la cabeza y en la mano una hoz afilada.
15 Salió del santuario otro ángel dando gritos estentóreos al que estaba sentado en la nube: "Arrima tu hoz y siega; ha llegado la hora de la siega, pues la mies de la tierra ya está pajiza".
16 El que estaba sentado encima de la nube acercó su hoz a la tierra y la segó.
17 Del santuario celeste salió otro ángel llevando también él una hoz afilada.
18 Del altar salió otro, el ángel que tiene poder sobre el fuego, y dio una gran voz al de la hoz afilada diciendo: "Arrima tu hoz afilada y vendimia los racimos de la viña de la tierra, que las uvas están en sazón".
19 El ángel acercó su hoz a la tierra, vendimió la viña de la tierra y echó las uvas en el gran lagar del furor de Dios.


EXPLICACIÓN.

En dos escenas paralelas y mediante descripciones poéticas se expresa la suerte de los que han aceptado el mensaje de Jesús y la de los que han sido enemigos del hombre.

Jesús (una figura humana, cf. 1,13; nube, corona de oro, condición divina) recoge la cosecha de grano, la de la humanidad salvada, en la hora que Dios designa (otro ángel dando gritos) (14-16).

Un ángel, en cambio, vendimia la uva (cf. Jl 3,13), siguiendo la orden del ángel del fuego (cf. 14,10: "fuego y azufre"). La escena amplifica el texto de Is 63,1-6, que describe en términos tragicos la aniquilación de los enemigos, para hacer triunfar el derecho de los oprimidos. Para el furor de Dios, cf. 14,10 (17-20).


Salmo Responsorial: Salmo 96:10-13


10Decid a los paganos: El Señor es rey:
él afianzó el orbe, y no vacilará;
él gobierna los pueblos rectamente.
11 Alégrense los cielos, goce la tierra, 
retumbe el mar y cuanto contiene;
12exulte la campiña y cuanto hay en ella,
aclamen los árboles silvestres
13delante del Señor, que ya llega,
ya llega a regir la tierra;
regirá el orbe con justicia
y a los pueblos con fidelidad.  
Explicación.
96,10 La segunda frase está tomada del Sal 93,1, la tercera falta en el paralelo 1 Cr 16,31; algunos suprimen ambas para que quede el clamor escueto.
96,11 Conforme al contexto, el mugido del mar es festivo: es su voz.
96,12 Es el verso más original, síntesis de lo campestre (Dt 32,13) Y lo silvestre.
96,13 Gobernar incluye el juzgar. El hombre puede fiarse de su gobierno. (Comentaré estos versos en el Sal 98).
Trasposición cristiana.
Se pueden seguir dos pistas: el adviento y el reinado. Dejando la primera para el Sal 98, me fijo en la segunda. El Apocalipsis canta el reinado del Padre y de su Mesías: 11,15.17; 12,10-12; 19,6; véanse también 1 Cor 15,25; Col 1,13.

Evangelio: Lucas 21:5-11

5 Como algunos hablaban del templo, ponderando la calidad de la piedra y el adorno de los exvotos, dijo:
6 - Eso que contempláis llegará un día en que no dejarán piedra sobre piedra que no derriben.

LA GUERRA NO ANUNCIA EL FIN. PERSECUCIONES.

7 Entonces le hicieron esta pregunta:
- Maestro, ¿cuándo va a ocurrir eso? y ¿cuál será la señal, cuando eso esté para suceder?
8 Él respondió:
- Cuidado con dejarse extraviar, porque van a llegar muchos diciendo en nombre mío: "Yo soy" y "El momento está cerca"; no os vayáis tras ellos.
9 Cuando oigáis estruendo de batallas y subversiones, no tengáis pánico, porque eso tiene que suceder primero, pero el fin no será inmediato.
10 Entonces dijo a los discípulos:
- Se alzará nación contra nación y reino contra reino, 
11 habrá grandes terremotos y, en diversos lugares, hambre y epidemias; habrá fenómenos terribles y señales grandes en el cielo.


Explicación.

En Lc, la predicción de Jesús y su discurso sobre el futuro de Jerusalén y del templo y sobre el reinado de Dios en la historia se pronuncian dentro del templo y se dirigen a los que escuchaban su enseñanza (cf. Mt 24; Mc 13).

(5s) A la admiración por la belleza del templo responde Jesús con la predicción de su ruina (cf. 19,41-44: lamento sobre Jerusalén).

(7) La pregunta siguiente no manifiesta sorpresa; de hecho, se pensaba que estaba próximo el cumplimiento de la profecía de las setenta semanas (Dn 9,24-27), y que el momento de máxima ruina señalaría el comienzo de la restauración de Israel y la derrota de los paganos (Dn 7,27). La pregunta es doble: quieren saber el momento en que tendrá lugar el desastre y, en segundo lugar, cuál será la señal que anuncie la inversión del curso de los acontecimientos y la restauración.

(8-19) Comienza el discurso previniendo contra un engaño: el desastre no anuncia una restauración: el presupuesto de la pregunta es falso. De hecho, dentro del grupo judeocreyente muchos simularán espíritu de profecía: atribuirán a Jesús el papel de restaurador de Israel (Yo soy: el Mesías nacionalista) y anunciarán la inminencia de su intervención (el momento está cerca) (8).

Sin embargo, los acontecimientos guerreros no anunciarán el fin de la opresión ni la inmediata restauración mesiánica (9). Habrá guerra y desastres (10s). Pero, lo mismo que el rechazo de "el Hombre" había de proceder a la destrucción de Jerusalén, también los discípulos serán perseguidos de parte de los poderes judíos y paganos.



LUNES 26 DE NOVIEMBRE DEL 2012.

Primera Lectura: Apocalipsis 14:1-5

1 En la visión apareció el Cordero de pie sobre el monte Sión y con él ciento cuarenta y cuatro mil que llevaban inscrito en la frente el nombre del Cordero y el nombre de su Padre.
2 Oí también un fragor que bajaba del cielo, parecido al estruendo del océano y al estampido de un trueno fuerte;
3 era el son de citaristas que tañían sus cítaras delante del trono, delante de los cuatro vivientes y los ancianos, cantando un cántico nuevo.
Nadie podía aprender aquel cántico fuera de los ciento cuarenta y cuatro mil, los adquiridos en la tierra.
4 Estos son los que no se han manchado con mujeres, porque son vírgenes; éstos son los que siguen al Cordero adonde quiera que vaya; los adquirieron como primicias de la humanidad para Dios y el Cordero.
5 En sus labios no ha habido mentira, no tienen falta.


EXPLICACIÓN.

Escenario, la tierra. La comunidad cristiana, que en la descripción anterior aparecía meramente pasiva, perseguida y oprimida por el poder, está, en realidad, segura, apiñada en torno a Jesús, gozosa y dispuesta a continuar su misión.

El monte Sión, símbolo de firmeza y seguridad; la presencia de Dios en él lo pone por encima de cualquier amenaza. Lugar idealizado desde donde se ejerce la acción del Mesías en la historia. Ciento cuarenta y cuatro mil (cf. 7,1-9), el nuevo Israel universal; el múltiplo mil se aplica a las realidades históricas en cuanto en ellas se ejerce la acción del Mesías. Los 144.000 representan, pues, al pueblo de Dios en cuanto asociado a la obra de la salvación mesiánica. En la frente, el sello impuesto en 7,1-9, en oposición al de la fiera; cf. 13,16 (1).

Que bajaba del cielo (2), la morada divina (cf. Ez 1,24; 43,2; Sal 29,3ss; 46,7), majestad (océano) y fuerza, atributos de Dios (trueno), canto acompañado de cítaras (3), armonía y dulzura. El cántico nuevo, cf. Sal 3,3; 40,4; 96,1; 98,1; 144,9; 149,1; se celebra la presencia y la actividad del Mesías-Cordero en la historia humana, con referencia al éxodo que efectúa (cf. 15,3).

Aun en medio de su tribulación, la iglesia terrestre puede unir su voz al cántico celeste. Características de los 144.000: no se marcharon con mujeres (4), metáfora para indicar que están siempre dispuestos al combate (cf. Dt 23,10-12; 1 Sm 21,5s; pureza o abstinencia sexual de los soldados en campaña); se han comprometido a estarlo siempre (porque son vírgenes). Esa disposición y prontitud les permite seguir a Jesús sin condiciones (adonquequiera que vaya), colaborando en la obra salvadora. Primicias, horizonte de salvación para la humanidad entera. No hubo mentira (5) (cf. Sal 32,3; Sof 3,13; Is 53,9): no han disimulado su adhesión a Jesús ni han cedido a compromisos con el paganismo opresor (cf. 13,8). No tienen falta, resume lo anterior.


Salmo Responsorial: Salmo 24:1-6


Sal 15; Is 33,14-16.

1 Del Señor es la tierra y cuanto la llena,
el orbe con sus habitantes,
2 pues él la fundó sobre las mares,
sobre las corrientes la afianzó.
3 -¿Quién puede subir al monte del Señor?,
¿´quién podrá estar en el reino sacro?
4 -El de manos inocentes y puro corazón,
el que no acude a los ídolos
ni jura en falso.
5 Ése recibirá del Señor la bendición
y la justicia de Dios su Salvador.
6 -Ése es el grupo que lo busca;
que viene a visitarte, Dios de Jacob.


Explicación.

24,1-2 Toma la imagen de fundadores y constructores de ciudades (Gn 4,17; Jos 6,26; 1 Re 16,34), y la atribuye a Dios, fundador de la tierra: Sal 78,69; 89,12; 102,26; Job 38,4-7. Los hombres asientan sobre roca o terreno firme; Dios cimienta la tierra sobre el movedizo e inestable océano. Por debajo de los continentes discurren corrientes que afloran en los manantiales.

24,2 Job 38,4-7.

24,3 El "recinto" o lugar santo supone previa elección y consagración: frecuente en Deuteronomio.

24,4-6 Juntan cualidades éticas con buscar a Dios, sin definir exactamente la relación.

24,4 Manos y corazón son un merismo que incluye toda clase de acciones, pensamientos y deseos. Siguen dos preceptos del decálogo. "Acudir": la expresión hebrea parece significar una tendencia intensa hacia algo: cfr. Dt 24,25; Prov 19,18.

24,5 Aunque mencione al patriarca Jacob creo que se refiere a las bendiciones condicionadas de la alianza. La "justicia" es la que consiste en la observancia, según Dt 6,25.

24,6 No se trata de una procesión formalista, realmente vienen buscando a Dios, en el templo.


TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

1 Cor 10,26, cita el primer verso del salmo para justificar la libertad cristiana. La tradición antigua y la liturgia aplican el salmo a la ascensión de Jesucristo; algunos autories componen con la fantasía una escena celeste, con diálogo de ángeles. El cortejo se identifica con la comunidad cristiana.


Evangelio: Lucas 21:1-4


1 Alzando los ojos vio a los ricos que echaban sus donativos en el tesoro del templo;
2 vio también a una viuda muy pobre que echaba unos céntimos
3 y dijo:
- Esa viuda, que es pobre, ha echado más que nadie, os lo aseguro;
4 porque todos ésos han echado donativos de lo que les sobra: ella, en cambio. sacándolo de su falta, ha echado todo lo que tenía para vivir.


EXPLICACIÓN.

Con el ejemplo de la viuda muestra Jesús que Israel no podía satisfacer a Dios dándole lo superfluo, sino con su entrega total a él (cf. 10,27). Dios no necesita cosas, quiere la confianza total de la persona.