jueves, noviembre 01, 2018

LECTURAS DEL VIERNES 30 DE NOVIEMBRE DEL 2018


Primera Lectura: Romanos 10:9-18

9Porque si tus labios profesan que Jesús es Señor y crees de corazón que Dios lo resucitó de la muerte, te salvarás. 10La fe interior obtiene la rehabilitación y la profesión pública obtiene la salvación, 11pues dice la Escritura: "Ninguno que crea en él quedará defraudado" (Is 28,16). 12Y ya no hay distinción entre judío y griego, porque uno mismo es el Señor de todos, generoso con todos lo que lo invocan; 13porque "todo el que invoca el nombre del Señor se salvará" (Jl 3,5).
             14Pero, ¿cómo van a invocarlo sin creer en él?, y ¿cómo van a creer sin oír hablar de él?, y ¿cómo van a oír sin uno que lo anuncie? 15y ¿cómo lo van a anunciar sin ser enviados? Según aquello de la Escritura: "Bienvenidos los que traen buenas noticias" (Is 52,7).
16 Sin embargo, no todos han respondido a la buena noticia. Mirad lo que dice Isaías:"Señor, ¿quién ha dado fe a nuestro mensaje?" (Is 53,1). 17¿Lo ves? La fe sigue al mensaje, y el mensaje es el anuncio del Mesías. 18Pero pregunto yo: ¿Será que no han oído hablar? Todo lo contrario, "a toda la tierra alcanzó su pregón y hasta los límites del orbe su lenguaje" (Sal 19,5). 

EXPLICACIÓN.

La nueva palabra es la profesión de fe, que nace del corazón (Dt 30,12-14). La fe, que es entrega a Dios en la adhesión a Jesús Mesías, obtiene la rehabilitación. La profesión pública, que es una ruptura con el pasado y un compromiso de acción, obtiene vida (Espíritu) y salvación (Is 28,16; Jl 3,5) (10-13). Jesús, a diferencia de Moisés, no ha dejado libros. Es la palabra viva de la predicación la que transmite su mensaje (Is 52,7) (14-15).

Los israelitas no sólo tenían los textos del Deuteronomio, sino que la apertura a los paganos se les había declarado explícitamente por medio de los profetas (Is 53,1), y la habían rechazado.


8 La ley del Señor es perfecta:
devuelve el respiro;
el precepto del Señor es fiable:
instruye al ignorante;
9 los mandatos del Señor son rectos:
alegran el corazón;
la norma del Señor es límpida:
da luz a los ojos;
10 el respeto del Señor es puro:
dura para siempre;
los mandamientos del Señor son genuinos;
justos sin excepción;
11 son más valiosos que el oro,
que el metal más fino;
son más dulces que la miel 
que destila un panal.

Explicación.

19,8-11 Tercera sección. Sin transición ni introducción entre un tema nuevo. Entra la ley abriendo paso a seis sentencias de una regularidad exasperante, como materializando en lenguaje el orden que intenta establecer. Sólo sies: falta una para la perfección.
Los predicados son en gran parte corpóreos: respiración, corazón, ojos; es límpida y pura, es estable y ofrece apoyo. Es razonable, no teme dar razones y así educa al inexperto sin dejarlo en su ignorancia. Es lúcida, no exige obediencia ciega, sino que ilumina los ojos. Da alegría interna, no es carga insoportable.
El último verso propone dos coparaciones: oro, símbolo y medida de valor; miel, manjar el más sabroso (Prov 16,24). El autor piensa en el contenido más que en la formalidad de la ley.

Evangelio: Mateo 4:18-22

 18 Caminando junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos: a Simón, el llamado Pedro, y a Andrés, su hermano, que estaban echando una red de mano en el mar, pues eran pescadores.
19 Les dijo:
                  - Veníos conmigo y os haré pescadores de hombres.
                 20 Inmediatamente dejaron las redes y lo siguieron.
                 21 Pasando adelante vio a otros dos hermanos: a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, que estaban en la barca poniendo a punto las redes, con Zebedeo, su padre. Jesús los llamó.
                22 Inmediatamente dejaron la barca y a su padre y lo siguieron.

EXPLICACIÓN.

18 - 22.      Esta llamada es el paradigma de todas las demás en Mt. El mar/lago, frontera con los pueblos paganos y alusión al éxodo. La insistencia en el vínculo de hermandad (18.21) alude a Ez 47,13s, donde se anuncia el futuro reparto de la tierra a partes iguales ("cada uno como su hermano"): igualdad de todos sus seguidores. La invitación de Jesús (19) recuerda la llamada de Eliseo por parte de Elías (1 Re 19,19-21). Lo presenta como profeta e implica la comunicación de su Espíritu. Pescadores de hombres, cf. Ez 47,10. Jesús llama a una misión que pretenderá atraer a los hombres (judíos y paganos). Santiago y Juan, hermanos; presencia del padre, figura de la autoridad y de la tradición (21). En lo sucesivo no deberán reconocer más que al Padre del cielo (6,9; 23,9) (21-22).

LECTURAS DEL JUEVES 29 DE NOVIEMBRE DEL 2018


PRIMERA LECTURA. Eclesiástico 44,1.10-15.


La historia


           1Voy a hacer el elogio de los hombres de bien, 
           de la serie de nuestros antepasados: 

10No así los hombres de bien: 
su esperanza no se acabó, 
11 sus bienes perduran en su descendencia, 
su heredad pasa de hijos a nietos. 
12Sus hijos siguen fieles a la alianza,
y también sus nietos, gracias a ellos. 
13Su recuerdo dura por siempre,
su caridad no se olvidará. 
14SepuItados sus cuerpos en paz,
vive su fama por generaciones;
15el pueblo cuenta su sabiduría,

           la asamblea pregona su alabanza. 

Explicación.

44,1 El término "de bien" es el clásico hsd: hombres que han recibido de Dios la bondad o misericordia, y la ejercitan con los demás. Lo cual significa ya una selección en la mente del autor: bienhechores. Además los considera en su categoría de "antepasados", con fuerte expresión de continuidad y pertenencia: casi tradición biológica.  

44,10-15 Repite la fórmula del verso primero. La continuidad de las generaciones y la del recuerdo forman la tradición de Israel. El recuerdo hace presentes y actuales los antepasados, como los descendientes hacen presente una estirpe. El recuerdo está ligado a la caridad, según la convicción del autor, Eclo 40,17; Sal 112: es la práctica de la "misericordia" que encabeza el fragmento. Pero el hombre no sobrevive, sólo perdura su fama: compárese con Eclo 39,9-11. 




SALMO. 24,1-6.

Sal 15; Is 33,14-16.

1 Del Señor es la tierra y cuanto la llena,
el orbe con sus habitantes,
2 pues él la fundó sobre las mares,
sobre las corrientes la afianzó.
3 -¿Quién puede subir al monte del Señor?,
¿´quién podrá estar en el reino sacro?
4 -El de manos inocentes y puro corazón,
el que no acude a los ídolos
ni jura en falso.
5 Ése recibirá del Señor la bendición
y la justicia de Dios su Salvador.
6 -Ése es el grupo que lo busca;
que viene a visitarte, Dios de Jacob.

Explicación.

24. Se suele considerar este salmo como liturgia de entrada en el templo, y hace compañía al 15. Se reconstruye o conjetura una acción litúrgica en la que encajan los datos del salmo: introducción hímnica, doble diálogo, presentación del grupo, entrada del Señor.

El acto litúrgico se imagina a la luz de textos narrativos: 2 Sm 6,13-15; Éx 40,21.34; 43,4. Divergen los autores al asignarle la ocasión litúrgica: en la fundación o conmemoración del traslado del arca (2 Sm 6): canto de victoria; fiesta de la renovación de la alianza; fiesta de la entronización de Ywhw. Es decir, el salmo se presta a varias lecturas, a varios empleos.

La composición es muy regular e invita a observar correspondencias y distinciones. De un escenario univeral (1-2) se salta a la concentración extrema en el templo: cfr. 1 Re 8,27. Se corresponden: tierra / habitantes = templo / visitantes. Al templo llegan al parecer juntos, un grupo de fieles (3-6) y el Señor Glorioso (7-10). Para los fieles pregunta, para Ywhw imperativos; los fieles con condiciones, Ywhw sin condiciones; identificados los fieles en su búsqueda diligente, Ywhw en su nombre y título.

24,1-2 Toma la imagen de fundadores y constructores de ciudades (Gn 4,17; Jos 6,26; 1 Re 16,34), y la atribuye a Dios, fundador de la tierra: Sal 78,69; 89,12; 102,26; Job 38,4-7. Los hombres asientan sobre roca o terreno firme; Dios cimienta la tierra sobre el movedizo e inestable océano. Por debajo de los continentes discurren corrientes que afloran en los manantiales.

24,2 Job 38,4-7.

24,3 El "recinto" o lugar santo supone previa elección y consagración: frecuente en Deuteronomio.

24,4-6 Juntan cualidades éticas con buscar a Dios, sin definir exactamente la relación.

24,4 Manos y corazón son un merismo que incluye toda clase de acciones, pensamientos y deseos. Siguen dos preceptos del decálogo. "Acudir": la expresión hebrea parece significar una tendencia intensa hacia algo: cfr. Dt 24,25; Prov 19,18.

24,5 Aunque mencione al patriarca Jacob creo que se refiere a las bendiciones condicionadas de la alianza. La "justicia" es la que consiste en la observancia, según Dt 6,25.

24,6 No se trata de una procesión formalista, realmente vienen buscando a Dios, en el templo.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

1 Cor 10,26, cita el primer verso del salmo para justificar la libertad cristiana. La tradición antigua y la liturgia aplican el salmo a la ascensión de Jesucristo; algunos autores componen con la fantasía una escena celeste, con diálogo de ángeles. El cortejo se identifica con la comunidad cristiana.  


EVANGELIO. Marcos 10,17-21.


El hombre rico (Mt 19,16-22; Lc 18,18-23)  

17Mientras salía de camino se le acercó uno corriendo y, arrodillándose ante él, le preguntó:
-Maestro insigne, ¿qué tengo que hacer para heredar vida definitiva?
18Jesús le contestó:
-¿Por qué me llamas insigne? Insigne como Dios, ninguno. 19Ya sabes los mandamientos: no mates, no cometas adulterio, no robes, no des  falso testimonio, no defraudes, sustenta a tu padre y a tu madre.
20ÉI le declaró:
-Maestro, todo eso lo he cumplido desde joven: 
21Jesús se le quedó mirando y le mostró su amor diciéndole:
-Una cosa te falta: ve a vender todo lo que tienes y dáselo a los pobres, que tendrás en Dios tu riqueza; y anda, ven y sígueme. 
 Explicación.
(10,17-21): La riqueza, obstáculo para seguir a Jesús. Un hombre angustiado busca solución para el problema crucial: superar la muerte. Reconoce en Jesús un saber superior (Maestro insigne)(17). En este asunto, los judíos han tenido al mejor de los maestros, Dios (18). Condición mínima para obtener vida definitiva: no ser personalmente injusto. De los diez mandamientos, Jesús omite los tres primeros, cita solamente los éticos, los que se refieren al prójimo. Mc añade no defraudes, no privar a otro de lo que se le debe. Invierte el orden (el cuarto, al final): la obligación para con la familia no exime de la obligación para con la humanidad (19). Fidelidad de aquel hombre (20). Le demostró su amor invitándolo a incorporarse al grupo de discípulos; una cosa te falta: acoger el reinado de Dios como un chiquillo (10,15), abandonando la riqueza (8,34: «reniegue de sí mismo») para hacerse último y servidor de todos (9,35). Aunque personalmente no es injusto, está implicado, por su riqueza, en la injusticia de la sociedad. Para construir el reino de Dios (la sociedad nueva) no basta ser justo personalmente, hay que eliminar la base de la injusticia, la desigualdad y la dependencia creadas por la acumulación de riqueza. Dar a los pobres, sin esperanza de recuperarlo; tendrás en Dios tu riqueza (lit. «tendrás un tesoro en el cielo») se refiere a 1 O, 14: «tienen a Dios por rey»: renunciando a la seguridad del capital se obtiene la que procura el cuidado de Dios por los suyos.

LECTURAS DEL MIÉRCOLES 28 DE NOVIEMBRE DEL 2018

2 OPCIONES.

1ª OPCIÓN.


Primera Lectura: Apocalipsis 15:1-4

1 Vi en el cielo otra señal, magnífica y sorprendente: siete ángeles que llevaban siete plagas, las últimas, pues con ellas se agotó el furor de Dios.
2 Vi también una especie de mar de vidrio veteado de fuego; en la orilla del mar de vidrio estaban de pie los que habían triunfado de la fiera, de su estatua y de la cifra de su nombre;
3 con cítaras que Dios les había dado cantaban el cántico de Moisés el siervo de Dios y el cántico del Cordero diciendo:

- Grandes y admirables son tus obras,
Señor Dios, soberano de todo;
justo y verdadero tu proceder,
rey de las naciones.
4 ¿Quién no te respetará?,
¿quién no dará gloria a tu nombre,
si sólo tú eres snato?
Todas las naciones vendrán
a postrarse ante ti,
porque tus justas sentencias
se han promulgado.

Explicación.

El septenario de los cuencos lleva a término la salvación/liberación: nuevo éxodo (2-4); se prepara el ataque de Dios a la fiera (5-8).

Visión de una señal magnífica (lit. "grande", cf. 12,1.3), es decir, portadora de un mensaje importante y sorprendente: "siete ángeles" que llevan siete plagas (1). Este término recuerda inmediatamente la liberación de Egipto; se trata, pues, de una acción divina que derrumba el poder ejercido por un opresor sobre los que son fieles a Dios. Son las últimas; la liberación entra en su fase final; el mal va a destruirse a sí mismo (se agotó el furor de Dios; cf. nota a 11,15-19).

Segunda visión, en paralelo con la primera: un mar de cristal (cf.4,6), pero esta vez veteado de fuego, símbolo de la prueba. Es una visión anticipada de la liberación que va a efectuarse y muestra la finalidad de las plagas anunciadas. Los liberados son los que han triunfado de la fiera, etc., no por la violencia, sino por la fidelidad y la constancia, sin ceder a la persecución ni a la presión ejercida contra ellos; en la orilla del mar que ya han atravesado (2). 

Lo mismo que Moisés, después de atravesar el Mar Rojo, había entonado el cántico de acción de gracias por la liberación de Egipto (Éx 15), los que no han cedido a la fiera entonan el cántico de su éxodo, agradeciendo su liberación; soberano de todo, el Creador;rey de las naciones, no ya de Israel: universalidad (3). Admiración (¿Quién no te respetará, etc.?). Las calamidades no pretenden aniquilar a las naciones, sino curarlas de su mal, haciéndoles reconocer al verdadero Dios (4).


(Sal 96; Is 40-55) 


1Cantad al Señor un cántico nuevo
porque ha hecho maravillas;
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo.
2EI Señor da a conocer su victoria,
revela su justicia a la vista de los pueblos.
3Se acordó de su lealtad y fidelidad
para la Casa de Israel.
Los confines de la tierra han contemplado
la victoria de nuestro Dios.
7Retumbe el mar y cuanto contiene,
el orbe y cuantos lo habitan;
8batan palmas los ríos
aclamen juntas las montañas
9delante del Señor, que ya llega,
a regir la tierra.
Regirá el orbe con justicia,
a los pueblos con rectitud.
Explicación.
98,1 Ap 5,9; 14,3.
98,1-3 Notamos una "victoria" singular y "maravillas" plurales. La explicación está en el "recuerdo" del Señor, el cual ha sido coherente con su modo de proceder, ha mantenido su "lealtad". La acción ha sido a favor de Israel y "justa", la manifestación es universal: Israel es escenario de la actuación de Dios.
98,7-8 También los ruidos de la naturaleza pueden incorporarse a la música: véanse Is 44,23; 49,13; 55,12.
98,9 "Viene": verbo poco frecuente predicado en sentido positivo de Dios; particularmente próximo es Is 40,5.10. El verbo tiene en primer lugar un significado espacial; en hebreo adquiere también un sentido temporal: el por-venir, el tiempo venidero, el año que viene. Este significado añadido abre el salmo a una proyección escatológica.
Transposición cristiana.

El tema del "venir" se realiza en el "adviento", en el Mesías "que ha de venir"; doble adviento, histórico y escatológico; ambos celebrados en nuestro adviento litúrgico. El segundo tema es el reinado, dominante en el NT: universal y justo. Al "cántico nuevo" se refiere Ap 5,9s.
Evangelio: Lucas 21:12-19

12 Pero antes de todo eso os perseguirán y os echarán mano, para entregaros a las sinagogas y cárceles y conduciros ante reyes y gobernadores por causa mía.
13 Tendréis en eso una prueba.
14 Ahora, haced el propósito de no preocuparos por vuestra defensa,
15 porque yo os daré palabras tan acertadas que ninguno de vuestros adversarios podrá haceros frente o contradeciros.
16 Hasta vuestros padres y hermanos, parientes y amigos, os entregarán y os harán morir a algunos.
17 Seréis odiados de todos por razón de mi persona,
18 pero no perderéis ni un pelo de la cabeza.
19 Con vuestra constancia conseguiréis la vida.

Explicación.

Pero, lo mismo que el rechazo de "el Hombre" había de proceder a la destrucción de Jerusalén, también los discípulos serán perseguidos de parte de los poderes judíos y paganos. Esto los confirmará en la verdad de su postura (cf. 6,22) (12s).

No preparar ninguna defensa, lo que equivaldría a reconocer la legitimidad del tribunal, sino esperar las palabras eficaces que se les inspiren (14s, cf. 12,11s). Serán sus connacionales judíos los que más se ensañen con ellos, pues el mensaje universalista del Reino anula el privilegio de Israel (16s). Confianza (cf. 12,7) (18). Lo importante es no cejar ante esa oposición a muerte por parte de la sociedad. La constancia garantiza la vida, como producía el fruto (8,15) (19).


2ª OPCIÓN.

Primera Lectura. Eclesiático 45,1-5

1 Amado de Dios y de los hombres, 
Moisés ¡Bendita su memoria!: 
2le dio gloria como de un dios,
lo hizo poderoso entre los grandes; 
3a su palabra se precipitaban los signos, 
lo mostró poderoso ante el rey,
le dio mandamientos para su pueblo y le mostró su gloria; 
4por su fidelidad y humildad
lo escogió entre todos los hombres, 
5le hizo escuchar su voz
y lo introdujo en la nube espesa; 
puso en su mano los mandamientos, 
ley de vida y de inteligencia,
para que enseñase los preceptos a Jacob, 
sus leyes y decretos a Israel. 

Explicación.

45,1-5 Un verso quiere afirmar la continuidad. Moisés ante el Faraón, como un dios 
en realizar prodigios; la aparición en el Sinaí y su misión al pueblo escogido; la entrega de 
la ley como don precioso para el pueblo.

Salmo. 16,1-2.5-8.11


1 ¡Guárdame, Dios, que me refugio en ti!
2 Declaro:
al Señor,
Tú eres mi dueño,
no tengo bien fuera de ti.


5 El Señor es la porción de mi lote y de mi copa;
tú controlas mi suerte:
6 me ha tocado una parcela apacible,
es espléndida mi heredad.

7 Bendigo al Señor que me aconseja,
aun de noche me instruyen mis entrañas.
8 Pongo siempre al Señor ante mí,
con él a mi derecha no vacilaré.


11 me enseñarás un camino de vida,
me colmarás de gozo en tu presencia,
de delicias perpetuas a tu diestra.


Explicación.


16,1 El comienzo es una variante de comienzo convencional. Se dirige al Dios supremo, ´el, como "guardián": cfr.. Sal 121.

16,2 El femenino "bien" aplicado al Señor es excepcional; puede estar inducido por el tema de la tierra; cfr. Sal 65,12; 68,11. Otros leen pregunta retórica así: "mi dicha ¿no está en ti?".



16,5 En el reparto de la tierra los levitas no reciben un lote, pues deben vivir del templo: Nm 18,20s; Dt 10,9; 18,1.
Este verso pesa mucho en la reconstrucción del comienzo.

16,7 El Señor es mi consejero personal. A su consejo reacciona la intimidad más honda, "los riñones" como sede de pasiones, como zona semiconsciente que el Señor sondea e ilumina. Es fórmula excepcional.

16,8 También excepcional por el verbo tan escogido y por ser el orante sujeto: la presencia de Dios se hace constante en la conciencia. Véase en contraste Ez 14,3. "Vacilar": en el supuesto, sacerdotal, o en la posición, vital.



16,11 Aunque bien establecido, se encuentra en camino: vivir es progresar hacia un término positivo: gozo, saciedad, delicias sin fin. Moisés pidió al Señor que le mostrara el camino, y el Señor accedió (Éx 33,13); pidió ver su gloria, y el Señor le enseño su bondad, no su rostro (Éx 33,18-20). El orante del salmo comienza con la "bondad"; al final Dios le enseña el camino y muestra su rostro. Más allá no queda nada.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

Aplican el salmo a Cristo resucitado. Hch 2,24 y 13,34. Pronunciado por Cristo, con variedad de aplicaciones, puede ser pronunciado por el cristiano con la esperanza segura de su resurrección.


Evangelio. Lucas 10,1-9


1 Después de esto el Señor designó a otros setenta y los mandó por delante, de dos en dos, a todos los pueblos y lugares adonde pensaba ir él.
2 Y les dijo:
- La mies es abundante y los braceros pocos; por eso, rogad al Señor de la mies que mande braceros a su mies.
3 ¡En marcha! Mirad que os envío como corderos entre lobos.
4 No llevéis bolsa ni alforja ni sandalias y no os paréis a saludar por el camino.
5 Cuando entréis en una casa lo primero saludad: "Paz a esta casa";
6 si hay allí gente de paz, la paz que les deseáis se posará sobre ellos; si no, volverá a vosotros.
7 Quedaos en esa casa, comed y bebed de lo que tengan, que el obrero merece su salario. No andéis cambiando de casa.
8 Si entráis en un pueblo y os reciben bien, comed de lo que os pongan,
9 curad a los enfermos que haya y decidles: "Está cerca de vosotros el reinado de Dios".


Explicación.


Designación y misión. Ante el fracaso de los Doce (9,40.51-56), Jesús se decide a crear otro grupo de mensajeros para que le preparen el camino (1: designó a otros setenta, mejor que 72), según el número de naciones paganas (cf. Hch 6,1ss; los Siete), seguidores de origen no judío, Samaría, la puerta hacia el paganismo (en Mt y Mc, Galilea).

Instrucciones más extensas que a los Doce (cf. 9,3-5). La humanidad está madura para el mensaje; la petición a Dios los identificará con el objetivo de la misión y les obtendrá el impulso necesario para ella (2). Inermes ante la sociedad hostil (3: ovejas, lobos). No preocuparse por el sustento (12,22ss); sandalias, propias de gente acomodada; los saludos eran prolijos: urgencia de la misión (4). Portadores de paz (5-7). Pueblo/ciudad, figura de ambientes de mentalidad abierta, a diferencia de "aldea" (cf. 9,6). No ser exigentes ni hacer distinciones entre los alimentos: integración en la cultura (8). Curar y proclamar (cf. 9,2) (9).

LECTURAS DEL MARTES 27 DE NOVIEMBRE DEL 2018

2 OPCIONES.

1ª OPCIÓN.


Primera Lectura: Apocalipsis 14:14-19


14 En la visión apareció una nube blanca y, sentada encima, una figura humana con una corona de oro en la cabeza y en la mano una hoz afilada.
15 Salió del santuario otro ángel dando gritos estentóreos al que estaba sentado en la nube: "Arrima tu hoz y siega; ha llegado la hora de la siega, pues la mies de la tierra ya está pajiza".
16 El que estaba sentado encima de la nube acercó su hoz a la tierra y la segó.
17 Del santuario celeste salió otro ángel llevando también él una hoz afilada.
18 Del altar salió otro, el ángel que tiene poder sobre el fuego, y dio una gran voz al de la hoz afilada diciendo: "Arrima tu hoz afilada y vendimia los racimos de la viña de la tierra, que las uvas están en sazón".
19 El ángel acercó su hoz a la tierra, vendimió la viña de la tierra y echó las uvas en el gran lagar del furor de Dios.

EXPLICACIÓN.

En dos escenas paralelas y mediante descripciones poéticas se expresa la suerte de los que han aceptado el mensaje de Jesús y la de los que han sido enemigos del hombre.

Jesús (una figura humana, cf. 1,13; nube, corona de oro, condición divina) recoge la cosecha de grano, la de la humanidad salvada, en la hora que Dios designa (otro ángel dando gritos) (14-16).

Un ángel, en cambio, vendimia la uva (cf. Jl 3,13), siguiendo la orden del ángel del fuego (cf. 14,10: "fuego y azufre"). La escena amplifica el texto de Is 63,1-6, que describe en términos tragicos la aniquilación de los enemigos, para hacer triunfar el derecho de los oprimidos. Para el furor de Dios, cf. 14,10 (17-20).



10Decid a los paganos: El Señor es rey:

él afianzó el orbe, y no vacilará;
él gobierna los pueblos rectamente.
11 Alégrense los cielos, goce la tierra, 
retumbe el mar y cuanto contiene;

12exulte la campiña y cuanto hay en ella,
aclamen los árboles silvestres
13delante del Señor, que ya llega,
ya llega a regir la tierra;
regirá el orbe con justicia
y a los pueblos con fidelidad.  
Explicación.

96,10 La segunda frase está tomada del Sal 93,1, la tercera falta en el paralelo 1 Cr 16,31; algunos suprimen ambas para que quede el clamor escueto.
96,11 Conforme al contexto, el mugido del mar es festivo: es su voz.
96,12 Es el verso más original, síntesis de lo campestre (Dt 32,13) Y lo silvestre.
96,13 Gobernar incluye el juzgar. El hombre puede fiarse de su gobierno. (Comentaré estos versos en el Sal 98).
Transposición cristiana.
Se pueden seguir dos pistas: el adviento y el reinado. Dejando la primera para el Sal 98, me fijo en la segunda. El Apocalipsis canta el reinado del Padre y de su Mesías: 11,15.17; 12,10-12; 19,6; véanse también 1 Cor 15,25; Col 1,13.
Evangelio: Lucas 21:5-11
5 Como algunos hablaban del templo, ponderando la calidad de la piedra y el adorno de los exvotos, dijo:
6 - Eso que contempláis llegará un día en que no dejarán piedra sobre piedra que no derriben.

LA GUERRA NO ANUNCIA EL FIN. PERSECUCIONES.

7 Entonces le hicieron esta pregunta:
- Maestro, ¿cuándo va a ocurrir eso? y ¿cuál será la señal, cuando eso esté para suceder?
8 Él respondió:
- Cuidado con dejarse extraviar, porque van a llegar muchos diciendo en nombre mío: "Yo soy" y "El momento está cerca"; no os vayáis tras ellos.
9 Cuando oigáis estruendo de batallas y subversiones, no tengáis pánico, porque eso tiene que suceder primero, pero el fin no será inmediato.
10 Entonces dijo a los discípulos:
- Se alzará nación contra nación y reino contra reino, 
11 habrá grandes terremotos y, en diversos lugares, hambre y epidemias; habrá fenómenos terribles y señales grandes en el cielo.

Explicación.

En Lc, la predicción de Jesús y su discurso sobre el futuro de Jerusalén y del templo y sobre el reinado de Dios en la historia se pronuncian dentro del templo y se dirigen a los que escuchaban su enseñanza (cf. Mt 24; Mc 13).

(5s) A la admiración por la belleza del templo responde Jesús con la predicción de su ruina (cf. 19,41-44: lamento sobre Jerusalén).

(7) La pregunta siguiente no manifiesta sorpresa; de hecho, se pensaba que estaba próximo el cumplimiento de la profecía de las setenta semanas (Dn 9,24-27), y que el momento de máxima ruina señalaría el comienzo de la restauración de Israel y la derrota de los paganos (Dn 7,27). La pregunta es doble: quieren saber el momento en que tendrá lugar el desastre y, en segundo lugar, cuál será la señal que anuncie la inversión del curso de los acontecimientos y la restauración.

(8-19) Comienza el discurso previniendo contra un engaño: el desastre no anuncia una restauración: el presupuesto de la pregunta es falso. De hecho, dentro del grupo judeocreyente muchos simularán espíritu de profecía: atribuirán a Jesús el papel de restaurador de Israel (Yo soy: el Mesías nacionalista) y anunciarán la inminencia de su intervención (el momento está cerca) (8).

Sin embargo, los acontecimientos guerreros no anunciarán el fin de la opresión ni la inmediata restauración mesiánica (9). Habrá guerra y desastres (10s). Pero, lo mismo que el rechazo de "el Hombre" había de proceder a la destrucción de Jerusalén, también los discípulos serán perseguidos de parte de los poderes judíos y paganos


2ª OPCIÓN.

Primera Lectura. Isaías 61,1-3

1El espíritu del Señor está sobre mí,
porque el Señor me ha ungido.
Me ha enviado para dar
una buena noticia a los que sufren,
para vendar los corazones desgarrados,
para proclamar la amnistía a los cautivos
y a los prisioneros la libertad,
2para proclamar el año de gracia del Señor,
el día del desquite de nuestro Dios;
para consolar a los afligidos,
los afligidos de Sión;
3para cambiar su ceniza en corona
su luto en perfume de fiesta,
su abatimiento en traje de gala.

Explicación.

61,1-9.11 Acepto la inversión de 10 y 11, con la cual el v.10 pasa a la perícopa siguiente, y el capítulo se articula en dos partes: vocación y misión del mensajero, mensaje de esperanza. El capítulo tiene numerosos contactos verbales con el 58.

61,1-3a En el tercer bloque del libro, estos versos funcionan como relato de vocación: véanse 42,1-4 y 49,1-6. Como en 40,9 su misión es pregonar una buena noticia. Para la tarea está equipado con el carisma del espíritu (48,16). Promulga un año jubilar de parte del Señor: Lv 25,10. "Desquite": porque el Señor paga a sus enemigos por su agresión; "gracia": porque resarce al pueblo de sus sufrimientos (Mt 11,5; Lc 7,22). Por su posible ambigüedad, suprimió Jesús la frase del desquite cuando leyó el rollo en la sinagoga de Nazaret (lc 4,18s), El gozo cambiará los ritos de luto en ritos de fiesta: Sal 30; lo contrario de Is 3,24.

Salmo. 40,2.4.7-11


2 Yo esperaba con ansia al Señor:

se inclinó a mí y escuchó mi grito.

4 Me puso en la boca un canto nuevo

de alabanza a nuestro Dios.
Muchos al verlo quedaron sobrecogidos
y confiaron en el Señor.


7 Sacrificios y ofrendas no los quieres;

me has cavado oídos;
no pides holocaustos ni víctimas expiatorias.
8 Entonces yo digo: "aquí he venido".
En el texto del rollo se escribe de mí
9 que he de cumplir tu voluntad:
y yo lo quiero, Dios mío,
llevo tu instrucción en las entrañas.
10 He proclamado el derecho
a una asamblea numerosa.
No he cerrado los labios,
Señor, tú lo sabes.
11 No me he guardado en el pecho tu justicia,
he anunciado tu verdad y tu salvación,
no he negado tu lealtad y fidelidad
a la asamblea numerosa.


Explicación.

40,2-4 El comienzo es una secuencia en cuatro escenas rápidas. Un hombre se debate en el lodo de una ciénaga, que amenaza tragárselo aprovechando sus esfuerzos; grita. Alguien lo saca y coloca sus pies en roca firme. Al sentir la solidez bajo los pies, rompe a cantar de gozo y agradecimiento. Un grupo que asistía expresa su confianza en el liberador.

40,2 La forma enfática traduce la expectación, casi la impaciencia del aguardar.

40,3 El lenguaje nos trae la figura de Jeremías en el aljibe fangoso: Jr 38,6.13.

40,4 "Poner en la boca" es fórmula de alcance profético: Dt 18,18; Jr 1,9; 5,14.


40,7-9 Es importante apreciar paralelismos y correlaciones. En esquema: sacrificios / holocaustos, oídos / escrito, vengo / quiero. El primero es un merismo que abarca el culto. El segundo sugiere un encargo oral y uno escrito. El tercero es correlativo del anterior y se articula en dos piezas complementarias: el acto de presentarse y la disponibilidad para ejecutarlo.

40,7 Los sacrificios se relativizan (Eclo 34,18-35,26). "Cavar los oídos" es metáfora única. La imagen parece fijarse en la hondura corporal que abre el oído hacia el interior del hombre: compárese con Is 50,4s.

40,8b-9 Lo que más interesa del texto es la asimilación del encargo y por implicación del tema. Lo que estaba en un "escrito", pasa a estar "en las entrañas"; el texto de la proclamación está amorosamente asimilado. Compárese con Ez 3,3.

40,10-11 La proclamación se enuncia en cuatro verbos y seis sustantivos. El insistir en formas negativas, el apelar al testimonio de Dios, hace sospechar algún riesgo en el encargo, como si algo grave indujera al silencio. El verbo positivo, "evangelizar", significa en la vida civil anunciar una buena noticia. Es típico del profeta del destierro, que también tropezaba con resistencia y hostilidad: Is 40,9; 41,27; 52,7 y 60,6; 61,1; Sal 96,2. El "derecho" recurre también en Is 41,2-10; 42,6.21; 45,19; 51,1.5.7. Los otros sustantivos, con posesivo "tu", pertenecen a una tradición ancha, también presente en el salterio.
Ahora imaginemos que ha comenzado la predicación, que provoca resistencia, oposición, persecución; el orante invoca el auxilio de quien le encomendó la tarea. Es lo que sigue en 12-18.


TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.

La carta a los Hebreos recoge y comenta la parte central del salmo, según la versión griega de los LXX. En vez de "me cavaste oídos", dice "me aparejaste un cuerpo"; traduce "rollo" por "título". De este modo opone el autor a los sacrificios antiguos la entrega del Mesías. De aquí arranca el uso de los antiguos de poner todo el salmo en boca de Cristo y después en boca de la Iglesia.


Evangelio. Mateo 5,13-16

13 Vosotros sois la sal de la tierra. Y si la sal se pone sosa, ¿con qué se salará? Ya no sirve más que para tirarla a la calle y que la pisotee la gente.

                   14 Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad situada en lo alto de un monte;
15 ni se enciende una lámpara para ponerla en el candelero y que brille para todos los de la casa.
16 Empiece así a brillar vuestra luz ante los hombres; que vean el bien que hacéis y glorifiquen a vuestro Padre del cielo.

EXPLICACIÓN.

13 - 16. La sal, factor de incorruptibilidad, símbolo de la permanencia de la alianza (Lv 2,13; Nm 18,19; 2 Cr 13,5). La luz, la gloria o esplendor de Dios que había de brillar sobre Jerusalén (Is 60,1-3). Los discípulos son la nueva ciudad santa donde Dios habita (cf. 27,53). La gloria se manifiesta en su modo de obrar (5,7-9), en el que los hombres reconocen a Dios como Padre.