miércoles, agosto 01, 2018

LECTURAS DEL MARTES 21 DE AGOSTO DEL 2018

2 OPCIONES.

1ª OPCIÓN.

Primera Lectura. EZEQUIEL 28,1-10.

Contra el rey de Tiro (Is 14).

1Me dirigió la palabra el Señor:
2-Hijo de Adán, di al príncipe de Tiro:
Esto dice el Señor:
Se hinchó tu corazón y te dijiste:
“Soy Dios, entronizado en solio de dioses
en el corazón del mar”;
tú que eres hombre y no dios
te creías listo como los dioses.
2¡Si eres más sabio que Daniel!,
ningún enigma se te resiste.
4Con tu talento, con tu habilidad,
te hiciste una fortuna:
acumulaste oro y plata en tus tesoros.
5Con agudo talento de mercader
ibas acrecentando tu fortuna,
y tu forma te llenó de presunción.
6Por eso, así dice el Señor:
Por haberte creído sabio como los dioses,
7por eso traigo contra ti
bárbaros pueblos feroces;
desnudarán la espada
contra tu belleza y tu sabiduría,
profanando tu esplendor.
8Te hundirán en la fosa,
morirás con muerte ignominiosa
en el corazón del mar.
9Tú que eres hombre y no dios,
¿osarás decir: “Soy Dios”,
delante de tus asesinos,
en poder de los que te apuñalen?
10Morirás con muerte de incircunciso,
a manos de bárbaros.
Yo lo he dicho –oráculo del Señor-.

EXPLICACIÓN.

28,1-10. Lo peculiar de este juicio es que, no contento con enunciar el delito, analiza el proceso psicológico. Empieza la habilidad mercantil, que produce y acumula riquezas, de las cuales nace la presunción, hasta la arrogancia de considerarse dios. Puede compararse con el proceso analizado en Dt 8 (S. Ignacio indica: riquezas, vano honor del mundo, crecida soberbia). A la presunción sigue la caída (Prov 18,12); otros pueblos serán ejecutores. En el momento de la ejecución, el juez dirige al reo una pregunta irónica: la muerte devuelve al presunto dios su dimensión humana; compárese con el Sal 82.

28,2. En la frase resuena algo del ceremonial de corte, recogido y adaptado en Sal 2; 45; Is 9. Ezequiel da a la expresión toda su fuerza blasfema: compárese con la réplica de Is 31,3.

28,3. Daniel es una figura legendaria cananea; su nombre significa Dios juzga. Juzgar rectamente es acto de sabiduría, como ilustra la anécdota de 1 Re 3,16-28. Pero aquí se habla de otras habilidades.

28,4. El verso resume el capítulo precedente.

28,6-7. Bárbaros que no respetan belleza, ni riqueza, como en Is 13,17.

28,8. Muerte “ignominiosa”, que profana (v.7), o de apuñalados, ajusticiados (v.9); el adjetivo consuena con riqueza: hll hyl. Coloca “la fosa” en el corazón del mar (cfr. Jon 2).

28,10. No conocemos la modalidad de esa muerte, que los israelitas consideraban particularmente afrentosa.



SALMO. DEUTERONOMIO 32,26-28.30.35-36.

26Yo pensaba:
“Voy a dispersarlos
y a borrar su memoria
entre los hombres”.
27Pero no; que temo
la jactancia del enemigo
y la mala interpretación
del adversario,
que dirían:
“Nuestra mano ha vencido,
no es el Señor
quien lo ha hecho”.
28Porque son una nación
que han perdido el juicio
y carece de inteligencia.
30¿Cómo es que uno
persigue a mil
y dos ponen en fuga
a diez mil?
¿No es porque su Roca
los ha vendido,
porque el Señor
los ha entregado?
35Mía será la venganza
y el desquite
en la hora en que tropiecen
sus pies,
pues el día de su perdición
se acerca
y su suerte se apresura
36-porque el Señor
defenderá a su pueblo
y tendrá compasión
de sus siervos-.
Cuando vea que
sus manos flaquean,
que se consumen
amos y criados.

EXPLICACIÓN.

32,26. Acabar con Israel en el presente y el futuro: dispersos y asimilados por otras naciones, dejarán de ser un pueblo con nombre propio.

32,27. El enemigo no sabe interpretar la historia en clave teológica: se agribue las victorias (como Israel la prosperidad, 8,17): véanse Is 10,13-14; 37,24-25; 47,8.10.

32,28-30. Nos inclinamos a pensar que este “pueblo” es Israel, que tampoco sabe interpretar la historia, y atribuye a su fuerza lo que es don de Dios (Lv 26,8; Dt 28,7).

32,34-35. El Señor va a actuar como juez. El delito consta en su archivo judicial, la sentencia será ejercicio de la justicia “vindicativa”, o sea castigo legal del delincuente.

32,36. Irrumpe la voz del recitador. En vez de “porque”, podría significar “cierto”. El anuncio se lee en Sal 135,14, lo cita 2 Mac 7,6

EVANGELIO DE MATEO 19,23-30.


23 Jesús dijo a sus discípulos:

                   - Os aseguro que con dificultad va a entrar un rico en el reino de Dios.
24 Lo repito: Más fácil es que entre un camello por el ojo de una aguja que no que entre un rico en el reino de Dios.
                   25 Al oír aquello, los discípulos se quedaron enormemente impresionados y decían:
                   - En tal caso, ¿quién puede subsistir?
                   26 Jesús se les quedó mirando y les dijo:
                   - Humanamente ese es imposible, pero con Dios todo es posible.
                   27 Intervino entonces Pedro:
                   - Pues mira, nosotros ya lo hemos dejado todo y te hemos seguido. En vista de eso, ¿qué nos va a tocar?
                   28 Jesús les dijo:
                   - Os aseguro que cuando llegue el mundo nuevo y el Hombre se siente en su trono de gloria, también vosotros, los que me habéis seguido, os sentaréis en doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel.
29 Y todo aquel que por causa mía ha dejado casa, o hermanos o hermanas, o padre o madre, o hijos o tierras, recibirá cien veces más y heredará vida definitiva.
30 Pero todos, aunque sean primeros, serán últimos, y aunque sean últimos, serán primeros,

EXPLICACIÓN.

Entrar en el Reino (23s) equivale seguir a Jesús (v.21; cf. 19,14). Práctica imposibilidad de que los ricos renuncien a su riqueza para hacerse discípulos. Subsistir (25), escapar/salvarse de un peligro: poner la vida física a slavo (16,22) evitando la indigencia. Humanamente, la única manera de subsistir está en la riqueza, que causa miseria en otros; con Dios (5,3: "tienen a Dios por rey"), los pobres no pasarań necesidad (6,19-34; 14,20; 15,37). Pedro pide seguridades concretas (27). El mundo nuevo comienza con la resurrección de Jesús; se siente en su trono de gloria (cf. 26,64). El Israel mesiánico (los Doce), con su seguimiento de Jesús, hará que, por contraste, el antiguo Israel, que rechaza el Mesías, quede juzgado y condenado. La renuncia a los bienes (29) no desembocará en la miseria, sino en una abundancia centuplicada (5,5).

                     "Todos", lit. "muchos", en el sentido de totalidad discreta: aunque sean primeros, adjetivo con sentido concesivo. La viña, figura del pueblo de Dios, antes Israel (Is 5,7; Sal 80,9s.15s), ahora la comunidad de Jesús (20,1). La parábola ilustra el principio inicial (19,30): la cantidad o calidad del trabajo o del servicio, la antigüedad, las diversas funciones, el mayor rendimiento no crean situación de privilegio ni son fuente de mérito, pues el servicio es respuesta a un llamamiento gratuito. El sentimiento del propio mérito crea descontento y división (11s.15). El servicio no se hace por deseo de recompensa, sino por la espontánea voluntad de ayuda a los demás (5,7.9). Se trabaja por crear igualdad, y ésta debe ser patente en la comunidad (cf. 18,1-5).



2ª OPCIÓN.


Primera Lectura. 1 Tesalonicenses 2,2-8


 2Continuamente damos gracias a Dios por todos vosotros al encomendaros en nuestras oraciones, 3recordando sin cesar ante Dios nuestro Padre la actividad de vuestra fe, el esfuerzo de vuestro amor y el tesón de vuestra esperanza en nuestro Señor, Jesús Mesías. 4Sabemos, hermanos amados por Dios, que él os ha elegido, 5porque la buena noticia que anunciamos no se quedó para vosotros en palabras, resultó además una fuerza exuberante del Espíritu Santo; tal fue nuestra actuación entre vosotros, como sabéis, para vuestro bien.
               6Por vuestra parte seguisteis nuestro ejemplo y el del Señor: a pesar de tantas dificultades, acogisteis el mensaje con la alegría del Espíritu Santo, 7convirtiéndoos en modelo para todos los creyentes de Macedonia y Grecia. 8Porque desde vuestra comunidad ha resonado el mensaje del Señor, y no solamente en Macedonia y Grecia; en todas partes vuestra fe en Dios ha corrido de boca en boca, de modo que nosotros no necesitamos hablar para nada; 

Explicación.

Exordio: Acción de gracias por el buen estado de la comunidad de Tesalónica. La mención de ella en sus oraciones aviva el recuerdo de su comportamiento cristiano: fe/adhesión a Jesús traducida en acción, amor que no se escatima, esperanza que no desfallece, todo centrado en Jesús, Mesías/Salvador (2-3).

                El amor de Dios, que ofrece la salvación a todos, se hace eficaz (os ha elegido) cuando el hombre responde a esa invitación (no se quedó en palabras) y recibe el Espíritu; eficacia del evangelio (4-5).

                La respuesta de los tesalonicenses se ha concretado en seguir la línea de Pablo y la de Jesús. No se han acobardado por la hostilidad de otros al evangelio, sino que le han dado una plena adhesión (6). Su fama ha trascendido y es notoria. Macedonia, la provincia romana del norte, con capital en Tesalónica; Grecia, lit. "Acaya", la provincia romana del sur, con capital en Corinto (7-8). 



Salmo. 89,2-5.21-22.25.27




2La lealtad del Señor cantaré eternamente, 


anunciaré de edad en edad tu fidelidad.

3Afirmo: Tu lealtad está construida en los cielos,
en ellos está firme tu fidelidad: 


4-He sellado una alianza con mi elegido,

jurando a David mi siervo: 

5«Te fundaré un linaje perpetuo 
y te construiré un trono para todas las edades».

21Encontré en David un siervo

y lo he ungido con óleo sagrado.

22Mi mano estará firme con él
y mi brazo lo hará esforzado. 


25Mi fidelidad y lealtad lo acompañarán,

en mi nombre se alzará su cuerno. 27EI me invocará: «Tú eres mi padre, 
mi Dios, mi Roca de salvación». 

89,27-28 Como título supremo, el rey de Israel es llamado hijo de Dios y puede invocar personalmente al Señor como Padre: Sal 2,7; 2 Sm 7,14. Este salmo añade un matiz: "primogénito". Lo que es el pueblo hebreo entre otros pueblos (Ex 4,23), lo es su rey entre los reyes. No por precedencia cronológica, sino por elección y nombramiento divinos.
Explicación.

89,2-3 El orante enuncia su programa: un canto para la posteridad, perdurable como el tema que trata y como su garantía celeste.
89,4-5 Sin introducción suenan palabras de Dios. Toma la iniciativa, elige como vasallo a David, le otorga con juramento (2 Sm 3,9; Sal 110,4; 132,11) una alianza, para él y sus sucesores en el trono.

89,21 De la unción sagrada se sigue el título de Ungido.
89,22 "Esforzado": con frecuencia usado para jefes: Is 41,10; Sal 80,18.
89,25 Dios le ofrece su propia escolta. El singular "cuerno" responde al plural del v. 18.
89,26 Límites del dominio de un soberano sobre reinos vasallos: 1 Re 5,1; Zac 9,10; Miq 7,11.
89,27-28 Como título supremo, el rey de Israel es llamado hijo de Dios y puede invocar personalmente al Señor como Padre: Sal 2,7; 2 Sm 7,14. Este salmo añade un matiz: "primogénito". Lo que es el pueblo hebreo entre otros pueblos (Ex 4,23), lo es su rey entre los reyes. No por precedencia cronológica, sino por elección y nombramiento divinos.
Transposición cristiana.
 Ya durante la economía antigua se leyó el salmo en clave mesiánica, y así lo han leído los cristianos. Parte del v. 21 se cita en Hch 13,22; 28b se cita en Ap 1,5. Más importantes son las relaciones temáticas: el título de Mesías, la unción, la relación Hijo / Padre, el título de primogénito (Rom 8,29; Col 1,15.18 Ap 1,5; Heb 1,6). Y para meditar el tema de la fidelidad, tenemos Rom 1,5.8; 2 Tim 2,11-13. 

Evangelio. Juan 21,15-17

El seguimiento de Pedro: La misión como pastoreo.

(Jn 21, 15-23)

15. Cuando acabaron de almorzar, le preguntó Jesús a Simón Pedro:
- Simón de Juan, ¿me amas más que éstos?
Le respondió:
- Señor, sí; tú sabes que te quiero.
Le dijo:
- Apacienta mis corderos.
16. Le preguntó de nuevo, por segunda vez:
- Simón de Juan, ¿me amas?
Le respondió:
- Señor, sí; tú sabes que te quiero.
Le dijo:
- Pastorea mis ovejas.
17. La tercera vez le preguntó:
- Simón de Juan, ¿me quieres?
Pedro se puso triste porque la tercera vez le había preguntado: “¿Me quieres?”, y le respondió:
- Señor, tú lo sabes todo, tú sabes que te quiero.
Le dijo:
- Apacienta mis ovejas.



Explicación.




En el episodio anterior (21,7), Jesús no se ha hecho eco del gesto de Pedro. Terminada la comida se dirige a él (cf. 20,27, con Tomás) (15). Evita que el problema personal interfiera en su contacto con la comunidad. Iniciativa de Jesús (le preguntó). Simón de Juan. Cf. 1,42. Ha pretendido destacarse del grupo ostentando ser el primero en la adhesión a Jesús (13,37). La pregunta (¿me amas más que éstos?), enfrenta a Pedro con su actitud, en presencia de los demás. Después de sus negaciones, Pedro evita toda comparación; te quiero, amor de amigo, en lugar de “te amo”, amor de identificación. Se remite al conocimiento de Jesús (tú sabes). Apacentar, procurar alimento, que, como el que da Jesús, es el don de la propia persona (14,15.21); corderos, los pequeños; ovejas, los grandes: totalidad del rebaño.


Segunda pregunta (16), más breve e incisiva: si realmente está identificado con él y lo toma por modelo, renunciando a todo otro ideal de Mesías. Igual respuesta de Pedro. Pastorear, dar la vida por las ovejas, como hace el pastor modelo (10,11); disposición propia de todo discípulo.

La tercera vez (17) recuerda la triple negación. Pedro había profesado dos veces ser amigo de Jesús (“tú sabes que te quiero”); “ser amigo”; renunciar a la idea de un Mesías de poder (18,10), a la relación de inferior a superior (13,6-8), al trabajo como siervo o asalariado (15,15). Se puso triste: Jesús parece desconfiar de sus afirmaciones anteriores y le hace recordar su obstinación (Pedro/Piedra). Tú lo sabes todo, nueva rectificación (cf. 13,37s). Apacienta mis ovejas sintetiza los dos encargos anteriores.



SÍNTESIS.


La mentalidad tipificada por Pedro, la del Mesías/la Iglesia de poder es el gran obstáculo para el seguimiento; considera a Jesús un líder a quien se presta una adhesión independiente de la comunidad y del mundo. Libertad y responsabilidad del discípulo en el seguimiento. Vínculo personal de amistad con Jesús. Cada cual ha de recorrer su propio camino y asumir su propia responsabilidad. La presencia de Jesús está asegurada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario