martes, julio 01, 2014

LECTURAS DEL JUEVES 31 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. Jeremías 18,1-6.

1Palabras que el Señor dirigió a Jeremías:
2-Anda, baja al taller del alfarero y allí te comunicaré mi palabra.
3Bajé al taller del alfarero, y lo encontré trabajando en el torno.
4A veces, trabajando el barro, le salía mal una vasija; entonces hacía otra vasija, como mejor parecía.
5Y me dirigió la palabra el Señor:
6-Y yo ¿no podré trataros, israelitas, como ese alfarero? Como está el barro en manos del alfarero, así estáis vosotros en mis manos, israelitas.

Explicación.

De la actividad artesana del alfarero, que modela su cerámica, surge un día la imagen de Dios como alfarero, que modela al hombre de barro de la tierra: Gn 2,7-8,19. De ahí resulta que el hombre posee un carácter o "modelado": Gn 6,5; 8,21. De aquí se pasa a usar como sinónimos "creador" y "modelador", del hombre y también de la historia: especialmente Isaías II. PUede verse: Is 27,11; 43,21; 44,2; 49,5; 64,7; Zac 12,1; Sal 33,15; 139,16.

El presente capítulo puede estar inspirado en Is 29,16. Jeremías es enviado acontemplar a un alfarero trabajando, desde la escena se remonta a predicar sobre la situación del momento: de lo cotidiano a lo trascendente, como la olla de 1,13s. La diferencia fundamental entre el barro y el hombre es que el hombre es responsable. El alfarero deshace lo que le salió mal y con el mismo barro comienza otra vasija; el hombre tiene que reformar lo que ha deformado. Si Dios es soberano, el hombre es responsable. Si el hombre se resiste al cambio, el alfarero tendrá que desechar toda la masa. El barro humano tiene la terrible capacidad de resistir al modelado de Dios. Él la quiere modelar con su palabra, no a la fuerza; es decir, con un dinamismo que actúe desde dentro.

SALMO. 146,1-6.

1¡Aleluya! Alaba, alma mía, al Señor
2alabaré al Señor mientras viva,
tañeré para mi Dios mientras exista.
3No confiéis en los nobles,
en un hombre que no puede salvarse:
4sale su aliento y él vuelve al polvo,
ese día perecen sus planes.
5Dichoso a quien auxilia el Dios de Jacob,
su esperanza es el Señor su Dios,
6que hizo el cielo y la tierra
el mar y cuanto hay en ellos;
que mantiene su fidelidad perpetuamente 

Explicación.

146,1-2 "Mientras viva" cambia y explica la expresión "siempre" de otros salmos.
146,2 Sal 118,9.
146,3-4 "Príncipes" y "hombres" están aliterados en hebreo. Más importante es la paronomasia de "hombre" a "su tierra" (horno ab humo). Sal 82,7 empareja príncipes con hombres. La recomendación y el motivo se leen en Is 2,22; cfr. Ecl 3,21.
146,5 La mención selectiva de Jacob trae el recuerdo de las doce tribus: aunque falte un rey humano, la memoria del patriarca sigue aglutinando.
146,6a División tripartita del universo. Seres celestes son los astros.
146,6b-7a "Fidelidad y justicia" pueden definir el gobierno del Señor; véanse Jr 50, 33; Sal 103,6. 
Trasposición cristiana.
Para el tema de la realeza de Dios y de su Mesías citamos Ap 11,15. Jesús desata a la mujer encadenada (Lc 13,16), abre los ojos a los ciegos (Mt 9,30; 11,5), alimenta a los hambrientos (Mt 14,13-21). 


EVANGELIO. Mateo 13,47-53.

   47 Se parece también el reino de Dios a la red que echan en el mar y recoge toda clase de peces:
48 cuando está llena, la arrastran a la orilla, se sientan, reúnen los buenos en cestos y tiran los malos.
49 Lo mismo sucederá al fin de esta edad: saldrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos
50 y los arrojarán al horno encendido. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.
              51 - ¿Habéis entendido todo esto?
              Contestaron ellos:
              - Sí.
              52 Él les dijo:
              - De modo que todo letrado instruido en el reino de Dios se parece al dueño de casa que saca de su arcón cosas nuevas y antiguas.
53 Cuando acabó estas parábolas se marchó Jesús de allí,

EXPLICACIÓN
.

La última parábola (47,50), como la de la cizaña, lleva su explicación, y su sentido es similar. Termina la instrucción privada. Entender, tema del capítulo (13,13.14.15.19.23.51). Deben transmitir el conocimiento recibido. El nuevo letrado no depende de su antigua tradición, lo nuevo tiene precedencia sobre lo antiguo; el mensaje de Jesús, clave de lectura del AT. 

Su tierra/su patria, no se nombra a Nazaret. Última vez que Jesús enseña en una sinagoga: se resume la actitud del Israel nacionalista frente a Jesús al término de su actividad en Galilea, la crisis de fe planteada a partir de 11,2 (11,6; 13,57).

LECTURAS DEL MIÉRCOLES 30 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. Jeremías 15,10.16-21

10¡Ay de mí, madre mía, que me engendraste
hombre de pleitos y contiendas
con todo el mundo!
Ni he prestado ni me han prestado,
y todos me maldicen.
16Cuando recibía tus palabras, las devoraba,
tu palabra era mi gozo y mi alegría íntima,
yo llevaba tu nombre, Señor, Dios de los ejércitos.
17No me senté a disfrutar
con los que se divertían,
forzado por tu mano me senté solitario,
porque me llenaste de tu ira.
18¿Por qué se ha vuelto crónica mi llaga
y mi herida enconada e incurable?
Te me has vuelto arroyo engañoso,
de agua inconstante.
19Entonces me respondió el Señor:
Si vuelves, te haré volver y estar a mi servicio,
si apartas el metal de la escoria, serás mi boca.
Que ellos vuelvan a ti, no tú a ellos.
20Frente a este pueblo te pondré
como muralla de bronce inexpugnable:
lucharán contra ti y no te vencerán
porque yo estoy contigo para librarte y salvarte
-oráculo del Señor-.
21Te libraré de manos de los perversos,
te rescataré del puño de los opresores.

Explicación.

15,10 Las relaciones comerciales originaban pletios, porque el prestamista tenía que reclamar el dinero (Eclo 29,1-7) y el prestatario buscaba subterfugios para no pagar o diferir el pago.

15,16 En nuestra reconstrucción, puede referirse a los oráculos iniciales de esperanza y consuelo, dirigidos a los israelitas del norte. En todo caso suena como recuerdo nostálgico de la primera ilusión juvenil.

15,17 La vocación le impone una terrible soledad. Las palabras que devoraba gozosamente lo llenan por dentro de la cólera divina, que tiene que derramar en forma de oráculos (6,11; 10,25).

15,18 "Arroyo engañoso": como retorciendo la imagen de Dios (2,13); véase Job 6,15s. El pleito arroja este balance: buenos servicios mal pagados, buenas palabras mal cumplidas. ¿Llevará Dios razón también en este pleito?

15,19 Dios responde sin dar explicaciones, antes reiterando sus exigencias. La solidaridad con el pueblo no puede consistir en alejarse con ellos; él tiene que volver y arrastrar a los demás. La boca del profeta tiene que ser acendrada: 6,29; Sal 12,7.

15,20 Dios reitera la promesa del día de la vocación. Escueta y categórica, capaz de dar temple al profeta para la crisis tremenda que se avecina.

SALMO. 59,2-4.10-11.17-18.

2Líbrame de mis enemigos, Dios mío,
sálvame de mis agresores,
3Líbrame de los malhechores,
sálvame de los sanguinarios;
4 pues mira que hombres crueles
me acechan emboscados.
Sin que yo haya pecado ni faltado, Señor, 
10Fuerza mía, por ti estoy velando,
que mi alcázar es Dios,
11mi Dios leal.
Que Dios se adelante y me haga ver
la derrota de mis enemigos. 
17Pero yo cantaré tu fuerza,
aclamaré por la mañana tu lealtad,
porque fuiste mi alcázar 
y un refugio en el peligro.
18Fuerza mía, tañeré para ti,
pues Dios es mi alcázar,
mi Dios leal.

EXPLICACIÓN.
59,2 Los "agresores" son gente que "se levanta". "Sálvame" es a la letra encarámame, encúmbrame, hazme inaccesible; la misma raíz de "alcázar".

59,3 "Sanguinarios": sugiere un peligro mortal.

59,4a Su táctica es el escondimiento, como en Sal 11,2.

59,4b-5a "Sin culpa": protesta de inocencia, como en salmos judiciales. La acción se hace abierta, en términos militares. 
59,10 "Fuerza": o con valor concreto, fortaleza, bastión. "Estoy velando": otras veces es el Señor quien vela por el hombre: Sal 121; 146,9 etc; pero los israelitas tenían organizadas velas nocturnas en el templo: Ex 12,42; Sal 63,7.

59,11 "Se adelante": con valor temporal: Sal 88,14; 119,147s. 
59,17 Se acabaron los gruñidos y aullidos, es hora del canto.

59,18 Cambiando una letra, en vez de "velar" (10) dice "tañer".

Trasposición cristiana.

 Los Padres ponen el salmo en boca de Cristo en su pasión. Puede declarar su plena inocencia (1 Pe 2, 22); "sanguinarios" son los que piden que "su sangre caiga sobre nosotros". Él pide al Padre "que no les dé muerte"; toman el v. 14 como profecía, no imprecación.    
EVANGELIO.Mateo 13,44-46.

  44 Se parece el reino de Dios a un tesoro escondido en el campo; si un hombre lo encuentra, lo vuelve a esconder, y de la alegría va a vender todo lo que tiene y compra el campo aquél.
                  45 Se parece también el reino de Dios a un comerciante que buscaba perlas finas;
46 al encontrar una perla de gran valor fue a vender todo lo que tenía y la compró.

Explicación.

Parábolas  del tesoro y de la perla: el compromiso total que exige el Reino no se hace por un esfuerzo ascético de voluntad, sino por la alegría de haber descubierto un valor insospechado e incomparable. Va a vender todo lo que tiene (44.46), alusión a 5,3 (cf. 19,21).

LECTURAS DEL MARTES 29 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. Jeremías 14,17-22.

17Diles esta palabra:
Mis ojos se deshacen en lágrimas,
día y noche, sin cesar,
por la terrible desgracia
de la capital de mi pueblo,
por su herida incurable.
18Salgo al campo:
muertos a espada; entro en la ciudad:
desfallecidos de hambre;
profetas y sacerdotes
recorren el país a la ventura.
19¿Por qué has rechazado a Judá
y sientes asco de Sión?
¿Es que nos has herido sin remedio?
Se espera mejoría y no hay bienestar,
al tiempo de curarse
sobreviene el delirio.
20Señor, reconocemos nuestra culpa
y los delitos paternos;
te hemos ofendido.
21Por tu nombre, no nos rechaces,
no desprestigies tu trono glorioso,
recuerda tu alianza con nosotros,
no la rompas.
22¿Hay entre los ídolos paganos
uno que dé lluvia?
¿Sueltan solos los cielos sus aguaceros?
Tú, Señor, eres nuestro Dios,
en ti esperamos,
porque eres tú quien hace todo eso.
(Éx 32,9-14; Nm 14,13-19; Sal 99,6).

Explicación.

14,17 El enlace es difícil. A manera de hipótesis, propongo la siguiente explicación. El profeta va a reaccionar compasivamente al mensaje, al parecer despiadado, del Señor. Dios toma esa reacción y la convierte en oracular. Ya que el profeta se resiste a conminar, que llore públicamente: su llanto impotente será profecía de la desgracia irremediable; sigue la visión intuitiva de la catástrofe. Otra explicación supone que aquí comienza otro oráculo.

14,18 "Espada y hambre": anunciados en 12.13.15 y 16.

14,19-22 En la interpretación propuesta, el profeta salta de la visión a la súplica apasionada, como no pudiendo contenerse, como insatisfecho de las lágrimas, como apostando a su vocación profética de intercesor. Se puede comparar con salmos de súplica: 44, 74 y 79.

SALMO. 79,8-9.11.13.

8No nos imputes los delitos de los antepasados.
Que tu compasión se apresure a alcanzamos,
pues estamos agotados.
9Socórrenos, Dios Salvador nuestro,
por el honor de tu nombre.
Líbranos y expía nuestros pecados,
en atención a tu nombre. 

11Llegue a tu presencia el lamento del cautivo,
con tu brazo poderoso
salva a los condenados a muerte.
12A nuestros vecinos págales siete veces
la afrenta con que te afrentaron, Señor.
13y nosotros, pueblo tuyo, ovejas de tu rebaño,
te daremos gracias siempre,
contaremos tus glorias
generación tras generación. 
Explicación.
79,8-9 Confesándose culpables, apelan a la compasión de Dios y al honor de su nombre. Los pecados de los antepasados se han acumulado bajo los pecados recientes (Is 65,7), "nuestros": los antiguos que Dios los olvide, los recientes que los "expíe". Estos tres versos son una confesión penitenclal resumida: puede verse ampliada en Esd 9; Neh 9-10; Dn 3 y 9; Bar 1,15-3,8.
79,8 "No imputes" o no recuerdes: con valor judicial: Is 43,25; Jr 31,34.

79,9 Sobre "expiar", además de los textos litúrgicos de Lv y Nm, pueden consultarse Is 6,7; 22,14; 27,9.  
79,11 Los cautivos se consideran "condenados a muerte" (1 Sm 20,31; 26,16) o formalmente o por el trato que reciben. A no ser que se refiera a un grupo entre los cautivos.


79,12 Los "vecinos" son reinos limítrofes que se han aprovechado de la derrota yhumillación de los judíos: como los idumeos de Abd 11-14; Sal 137; Lam 4,21.
79,13 El título "ovejas de tu rebaño" se lee en dos textos clásicos de pastores: Jr 23,1 Y Ez 34,31.

Trasposición cristiana.
El Apocalipsis recoge dos temas del salmo: los cadáveres sin enterrar y la venganza de los asesinados: Ap 11,7; 6,9. Piensa en un juicio final o definitivo, con oposiciones netas, sin intermedios. La Iglesia perseguida recita el salmo confesando sus pecados y pidiendo la justicia necesaria para liberar a las víctimas inocentes.  


EVANGELIO. Juan 11,19-27 o Lucas 10,38-42.

JUAN

19. y muchos judíos habían ido a ver a Marta y a María para darles el pésame por el hermano.
20. Al enterarse Marta de que llegaba Jesús, le salió al encuentro (María estaba sentada en la casa).
21. Dijo Marta a Jesús:
- Señor, si hubieras estado aquí, no habría muerto mi hermano;
22. pero, incluso ahora, sé que todo lo que le pidas a Dios, Dios te lo dará.
23. Jesús le dijo:
-Tu hermano resucitará.
24. Respondió Marta:
- Ya sé que resucitará en la resurrección del último día.
25. Le dijo Jesús:
-Yo soy la resurrección y la vida; el que me presta adhesión, aunque muera, vivirá,
26. pues todo el que vive y me presta adhesión, no morirá nunca. ¿Crees esto?
27. Ella le contestó:
-Sí, Señor, yo creo firmemente que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo.


EXPLICACIÓN.

19-27. La comunidad representada por los tres hermanos se encuentra dentro del territorio de Israel, es decir, aunque ha dado la adhesión a Jesús, no ha roto con la institución y modo de pensar judíos; de ahí nacen las falsas concepciones sobre la muerte y la resurrección y sobre la obra del Mesías.

Los judíos presentes en Betania (19) pertenecen a la institución enemiga de Jesús; sin embargo, dan muestras de amistad a esta comunidad de discípulos; no han visto en ellos una ruptura semejante a la de su Maestro.

El movimiento de Marta, cuyas creencias representan a las de la comunidad, responde al acercamiento de Jesús (20) que llega, aunque él no entra en la casa donde se expresa la solidaridad con la muerte. La frase de Marta (21) insinúa un reproche; ella cree que la muerte de su hermano ha interrumpido su vida. Esperaba una curación, sin darse cuenta de que la vida que Jesús les ha comunicado ha curado ya el mal radical del hombre: su esclavitud a la muerte. Primera de las cosas que sabe Marta (22; cf. 24), ambas por debajo del nivel de fe propio del discípulo: ve en Jesús un mediador infalible ante Dios, no comprende que Jesús y el Padre son uno (10,30) y que las obras de Jesús son las del Padre (10, 32.37). Espera una intervención taumatúrgica de Jesús, como la del profeta Eliseo (2 Re 4,8ss).

Jesús responde restituyendo la esperanza (23): la muerte de Lázaro no es definitiva; no atribuye la resurrección a una nueva acción suya personal, pues significa la persistencia de la vida comunicada con el Espíritu que efundirá en su muerte (6,39s). Marta interpreta las palabras de Jesús según la creencia farisea (24). Las palabras de Marta delatan una decepción (ya sé); ha oído lo mismo muchas veces. Para ella, como para los judíos, el último día está lejos; no comprende la novedad de Jesús.

Jesús no viene a suprimir o retrasar indefinidamente la muerte física, sino a comunicar la vida que él mismo posee y de la que dispone (5,26), su mismo Espíritu. En la frase de Jesús (25: yo soy la resurrección y la vida) el primer término depende del segundo: es la resurrección por ser la vida (14,6). La vida que él comunica, al encontrarse con la muerte, la supera; a esto se llama resurrección; no está reglada a un futuro, porque Jesús, que es la vida, está presente.
Para que la realidad de vida invencible que es Jesús llegue al hombre se requiere la adhesión, a la que él responde con el don del Espíritu, nuevo nacimiento a una vida nueva y permanente (3,3s; cf. 5,24). Expone Jesús (26) el principio que funda la afirmación anterior (cf. 8,51): para el discípulo, la muerte física no tiene realidad de muerte; la muerte, de hecho, no existe. Ésta es la fe que Jesús espera de Marta (¿Crees esto?). Marta responde con la perfecta profesión de fe cristiana (20,31); ya no es el Profeta (6,14), sino el Hijo de Dios, igual al Padre.

SÍNTESIS.

Se inaugura la etapa última y definitiva de la creación: para el que ha recibido el Espíritu de Dios no hay interrupción de vida, la muerte es sólo una necesidad física. 

LUCAS

38 Mientras iban de camino entró también él en una aldea, y una mujer de nombre Marta lo recibió en su casa.
39 Esta tenía una hermana llamada María, que se sentó a los pies del Señor para escuchar sus palabras.
40 Marta, en cambio, se dispersaba en múltiples tareas. Se le plantó delante y le dijo:
- Señor, ¿no se te da nada de que mi hermana me deje sola con el servicio? Dile que me eche una mano.
41 Pero el Señor le contestó:
- Marta, Marta, andas preocupada e inquieta con tantas cosas:
42 sólo una es necesaria. Sí, María ha escogido la parte mejor, y ésa no se le quitará.

EXPLICACIÓN.


B. Los dos grupos de seguidores. 38-42. Cambia el escenario: "una aldea" (reducto cerrado); temática: la verdadera acogida del mensaje. Paralelo con la "aldea" samaritana de 9,52 (38: también él entró en una aldea). En la escena no aparecen los discípulos. La doble mención de el Señor (39.40) saca a esta perícopa del plano histórico para ponerla en el paradigmático, mirando a las comunidades del tiempo de Lc.

Dos hermanas, figuras de los dos grupos de discípulos: Marta, de los que proceden del judaísmo/los Doce (9,1); María, de los Setenta (10,1). Marta, la comunidad judeocreyente, recibe a Jesús, pero sin aprender de él (38); María, la comunidad samaritana o no judía, queda en segundo plano, pero es la que le da plena acogida. A los pies del Señor (39), alusión a la pecadora (7,38.44-46).

Marta quiere arrastrar a su hermana a su dispersa actividad sin mensaje, inútil (múltiples tareas = observancia legal); el deseo de Marta corresponde al expresado antes por Juan en nombre de los Doce: imponer su modo de seguimiento a los que no pertenecen a ese grupo (9,49s) (40). Preocupaciones que ahogan el mensaje (8,14) (41). Una sola cosa (42: cf. 12,31; 18,22): el reinado de Dios, nueva tierra prometida, es la mejor parte, en comparación con la antigua tierra (Sal 16,5s; 73,26; 119,57; 142,6), el reino de Israel al que aún aspiran los Doce.

Samaría, que por su idolatría había perdido su herencia en Israel encuentra ahora su parte de la herencia en Jesús. El Israel mesiánico, que no escucha el mensaje, quiere conservar como herencia la antigua tierra prometida. Una temática paralela se encuentra en 18,15-17.

LECTURAS DEL LUNES 28 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. Jeremías 13,1-11.

1El Señor me ordenó:
-Ve, cómprate un cinturón de lino y póntelo a la cintura; que no lo toque el agua.
2Según la orden del Señor, me compré el cinturón y me lo puse a la cintura.
3El Señor me ordenó de nuevo:
4-Toma el cinturón comprado, que llevas ceñido, ve al río Éufrates y escóndelo allí en las hendiduras de una peña.
5Fui y lo escondí en el Éufrates, según la orden del Señor.
6Pasados muchos días, me ordenó el Señor:
-Ve al Éufrates y recoge el cinturón que te mandé esconder.
7Fui al Éufrates, cavé donde lo había escondido y recogí el cinturón: estaba gastado e inservible.
8Entonces el Señor me dirigió la palabra:
9-Así dice el Señor: Lo mismo desgastaré el orgullo de Judá y el orgullo desmedido de Jerusalén, 10de ese pueblo que se niega a obedecerme, que se porta obstinadamente, que sigue a dioses extranjeros y les rinde adoración. Serán como ese cinturón inservible. 11Como se adhiere el cinturón a la cintura del hombre, así me ceñí a judíos e israelitas para que fueran mi pueblo, mi fama, mi gloria y mi honor -oráculo del Señor-. Pero no obedecieron.

Explicación.

13,1-11 Acción simbólica o pantomima con explicación. "Adherirse" es uno de los términos clásicos con que el Dt expresa la fidelidad al Señor: 10,20; 11,22; 13,5.18; 30,20. La metáfora se traduce plásticamente en una prenda de vestido personal que se pega al cuerpo y a la vez puede ser gala o distintivo: Is 11,5; 49,18. El lino es tejido noble y puede ser de uso cúltico: Ez 44,17s; PRov 31,13. El nombre del rio puede ser ficción: el Éufrates es el río de Babilonia, donde se pudrirán los judíos infieles.

13,11 En vez de manifestar el honor del Señor, se alzaron orgullosamente con su condición de elegidos.

SALMO. Deuteronomio 32,18-21.

18¡Despreciaste a la Roca 
que te engendró,
y olvidaste al Dios
que te dio a luz!
19Lo vio el Señor, e irritado
rechazó a sus hijos e hijas,
20pensando: "Les esconderé
mi rostro,
y veré en qué acaban,
porque son
una generación depravada,
unos hijos desleales;
21ellos me han dado celos
con un dios ilusorio,
me han irritado
con ídolos vacíos;
pues yo les daré celos
con un pueblo ilusorio,
los irritaré
con una nación fatua.

Explicación.

32,18 Como el Señor exige una dedicación exclusiva, se pone celoso cuando le arriman rivales. Hay que notar la segunda persona en los v.15 y 18. Dioses extraños: como en Jr 2,25; 3,13; Is 43,12; 44,19. De cerca, del mismo territorio (Jos 24,15). Demonios es nombre raro, compartido con Sal 106,37.

32,19 El amor provoca los celos, los celos se transforman en cólera, la cólera se desfoga hiriendo.

32,20-21 Comienza el monólogo en forma de sentencia judicial: declaración del delito y anuncio de la pena, con correspondencia entre ambos, en una especie de ley del talión expresada con palabras repetidas o aliteradas. Otros monólogos de Dios: Jr 31,18-20; Os 11,8-9.

EVANGELIO. Mateo 13,31-35.

31 Les propuso otra parábola:
                   - Se parece el reino de Dios al grano de mostaza que un hombre sembró en su campo;
32 siendo la más pequeña de las semillas, cuando crece sale por encima de las hortalizas y se hace un árbol, hasta el punto que vienen los pájaros a anidar en sus ramas.
33 Les dijo otra parábola:
                   - Se parece el reino de Dios a la levadura que metió una mujer en medio quintal de harina; todo acabó por fermentar.
34 Todo eso se lo expuso Jesús a las multitudes en parábolas; sin parábolas no les exponía nada,
35 para que se cumpliese el oráculo de profeta:


                    Abriré mis labios para decir parábolas,
                    proclamaré cosas escondidas
                    desde que empezó el mundo (Sal 78,2).

EXPLICACIÓN.

31 - 32.        Los temas del árbol y de los pájaros ponen en relación esta parábola con Ez 17, 22ss, mostrando su sentido polémico: el reino de Dios no será un gran cedro (grandeza humana), se presentará como una realidad modesta. No continuará lo ya existente (cogollo del cedro), será una planta nueva. Los pájaros =  los pueblos paganos, universalidad del Reino.

33.                Completa la parábola anterior. Eficacia de la levadura; la presencia de los grupos cristianos hace madurar a la humanidad, actuando desde dentro de ella. 

34 - 35.      Termina la enseñanza a las multitudes. Hablar sólo en parábolas: las multitudes que esperaban la restauración gloriosa de Israel, no podían escuchar el mensaje expuesto claramente. Valor profético del AT.

LECTURAS DEL DOMINGO 27 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. 1 Reyes 3,5.7-12.

5En Gabaón el Señor se apareció aquella noche en sueños a Salomón, y le dijo:
-Pídeme lo que quieras.
7Pues bien, Señor, Dios mío, tú has hecho a tu siervo sucesor de mi padre, David; pero yo soy un muchacho que no sé valerme. 8Tu siervo está en medio del pueblo que elegiste, un pueblo tan numeroso que no se puede contar ni calcular. 9Enséñame a escuchar para que sepa gobernar a tu pueblo y discernir entre el bien y el mal; si no, ¿quién podrá gobernar a este pueblo tuyo tan grande?
10Al Señor le pareció bien que Salomón pidiera aquello, 11y le dijo:
-Por haber pedido esto, y no haber pedido una vida larga, ni haber pedido riquezas, ni haber pedido la vida de tus enemigos, sino inteligencia para acertar en el gobierno, 12te daré lo que has pedido: una mente sabia y prudente, como no la hubo antes de ti ni la habrá después de ti.

Explicación.

3,5 Hasta ahora la elección del nuevo rey no ha sido refrendada oficialmente por Dios. El profeta ha actuado con prudencia humana, el rey ha designado al sucesor. La presente perícopa ofrece la pieza que faltaba. El esquema se parece a algunos modelos egipcios: el rey se aleja de la corte para visitar un santuario famoso, allí ofrece un sacrificio, tiene en sueños una visión en que el dios le ordena algo o confirma sus planes, vuelven a la corte y comunica su visión a sus ministros.

3,7-9 La oración del rey está compuesta y desarrollada con cierta amplitud. En vez de pedir enseguida, retrasa la petición echando por delante una doble confesión, de donde resulta una estructura ternaria. Las dos confesiones tienen por tem David y Salomón, los dos comienzos subrayan el paralelismo, y sobre todo la iniciativa divina.
         Por la fraselogía, la oración recuerda el Deuteronomio y también algún salmo (p. ej., el 89). El libro de la Sabiduría, atribuido por ficción al rey Salomón (aunque escrito más de nueve siglos después), amplifica con gran riqueza esta oración (Sab 9).
        Los títulos correlativos. "Señor Dios mío - tu siervo", expresan aquí la relación de soberano y vasallo.

3,7 Jr 1,6.

3,8 Prov 14,28.

3,9 Salomón pide para gobernar una mente dócil, o sea, el arte de saber escuchar; y el discernimiento concreto entre el bien y el mal, que es suprema sabiduría (recuérdese Gn 2-3); véanse también Is 7,15; 5,20; Miq 3,2; nótese en el libro de los Proverbios lo frecuentes que son las valoraciones: "es bueno", "más vale", "no es bueno".

3,11-12 La respuesta del Señor también está muy estilizada. La construcción general se reduce a un quiasmo: no pediste / pediste / te daré lo que pediste / y lo que no pediste. Hay una desproporción entre los dones y la petición. La sabiduría extraordinaria de Salomón es don de Dios.

SALMO. 119,57.72.76-77.127-130.

57Mi porción es el Señor. He resuelto
observar tus consignas. 

72Más vale para mí la ley de tu boca
que mil monedas de oro y plata.  

76Sea tu misericordia mi consuelo
como lo prometiste a tu siervo.
77Que me alcance tu compasión, y viviré,
porque tu leyes mi delicia. 
127Por eso amo tus mandatos
más que el oro más puro.
128Por eso sigo derecho tus normas
y detesto toda senda engañosa.
129Admirables son tus preceptos:
por eso los observa mi alma.
130La explicación de tu palabra ilumina,
instruye a los inexpertos.
 Explicación.
119,57 -64 La "porción" corresponde al reparto de la tierra, de la cual los levitas no reciben parte, porque su lote es el Señor: Nm 18,20; Dt 10,9; el orante habla como un levita: Sal 16,5. "Aplacar" es, a la letra, acariciar el rostro: es acto ritual o de intercesión y tiene por objeto alguna culpa cometida. "Volver" parece sugerir un desvío previo. La frase del v. 62 fue tomada a la letra para inspirar o justificar la práctica litúrgica o ascética de interrumpir el sueño para alabar a Dios. El comienzo del v. 64 es cita del Sal 33,5.  
119,65-72 Con cuatro menciones de "bueno" puede componer un tratado de bienes. Dios es bueno y benéfico, buena es la instrucción de Dios y también la aflicción por la que aprendo. El "gusto" es metáfora de discreción o discernimiento: ls 7,15s; Sal 34,9. El pecado por "inadvertencia" (Sal 19,12s) se cura con un escarmiento leve. En 69-70 leemos dos de las pocas imágenes del salmo: dedicadas a enemigos malvados. El último verso adopta la forma clásica de refrán "más vale": compárese con Prov 3,15; 8, 10.19.
119,73-80 Se contraponen unos "fieles", que reverencian al Señor, y unos insolentes, que calumnian al orante; ellos fracasarán, éste no. De Dios se fija en aspectos complementarios: lo primero es la creación o "hechura" del hombre (Job 10,8); después es Dios maestro que enseña; ha de mostrar su "misericordia y compasión". 
119,121-128. "Ser fiador' pertenece al lenguaje comercial. Gente sin escrúpulos intenta aprovecharse del orante, el cual necesita alguien que salga fiador por él. Si el hombre debe ser cauto en dar fianza (Prov 6,1-5), Dios puede hacerlo sin peligro. Los "ojos se consumen" oteando, vigilando. El amo debe dar instrucciones al "siervo". "Senda engañosa": cfr. Prov 16,25.
119,129-136 "Admirables" o maravillosos, desbordan la comprensión del hombre, pero puede ponerlos en práctica. La Ley ilumina (Sal 19,9.12) y también Dios cuando muestra "su rostro radiante". No llora sus pecados, sino los ajenos: ¿es un llanto penitencial vicario?, ¿llora por celo de la ley, de compasión por los desgraciados? Los preceptos son como un aire que se "aspira" ansiosamente. 
Trasposición cristiana.
Muchos títulos, símbolos o privilegios atribuidos en el judaísmo a la tora son atribuidos en el NT a Jesucristo: luz, agua de la roca, camino, etc. Por tanto, donde leemos ley o mandato podemos pensar en Jesús como Mesías. Como los relatos del Pentateuco son también tora, así y mucho más lo es la vida de Cristo. La lectura se facilita usando la clave del "camino". Jesús se lo apropia como norma de conducta y vía de acceso al Padre, al cual añade los de verdad y vida, también presentes en el salmo. Con su conducta y enseñanza nos enseña "el camino auténtico de la vida". 
SEGUNDA LECTURA. Romanos 8,28-30.
28Sabemos también que, con los que aman a Dios, con los que él ha llamado siguiendo su propósito, él coopera en todo para su bien. 29Porque Dios los eligió primero, destinándolos dese entonces a que reprodujeran los rasgos de su Hijo, de modo que éste fuera el mayor de una multitud de hermanos; 30y a esos que había destinado, los llamó; a esos que llamó los rehabilitó, y a esos que rehabilitó les comunicó la gloria.

EXPLICACIÓN.
Cooperación de Dios con los cristianos incluso en circunstancias hostiles. No es que la calamidad sea de algún modo buena, sino que nada puede separar al cristiano del amor que Dios le tiene (cf. 8,35). La salvación es actual y consiste en reproducir los rasgos del hijo de Dios (cf. 8,17) (29-30). 

EVANGELIO. Mateo 13,44-52 o Mateo 13,44-46

44 Se parece el reino de Dios a un tesoro escondido en el campo; si un hombre lo encuentra, lo vuelve a esconder, y de la alegría va a vender todo lo que tiene y compra el campo aquél.
                  45 Se parece también el reino de Dios a un comerciante que buscaba perlas finas;
46 al encontrar una perla de gran valor fue a vender todo lo que tenía y la compró.

                 47 Se parece también el reino de Dios a la red que echan en el mar y recoge toda clase de peces:
48 cuando está llena, la arrastran a la orilla, se sientan, reúnen los buenos en cestos y tiran los malos.
49 Lo mismo sucederá al fin de esta edad: saldrán los ángeles, separarán a los malos de los buenos
50 y los arrojarán al horno encendido. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.
              51 - ¿Habéis entendido todo esto?
              Contestaron ellos:
              - Sí.
              52 Él les dijo:
              - De modo que todo letrado instruido en el reino de Dios se parece al dueño de casa que saca de su arcón cosas nuevas y antiguas.

EXPLICACIÓN.

44 - 52.     Parábolas  del tesoro y de la perla: el compromiso total que exige el Reino no se hace por un esfuerzo ascético de voluntad, sino por la alegría de haber descubierto un valor insospechado e incomparable. Va a vender todo lo que tiene (44.46), alusión a 5,3 (cf. 19,21). La última parábola (47,50), como la de la cizaña, lleva su explicación, y su sentido es similar. Termina la instrucción privada. Entender, tema del capítulo (13,13.14.15.19.23.51). Deben transmitir el conocimiento recibido. El nuevo letrado no depende de su antigua tradición, lo nuevo tiene precedencia sobre lo antiguo; el mensaje de Jesús, clave de lectura del AT.

LECTURAS DEL SÁBADO 26 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. Eclesiástico 44,1.10-15.

1Voy a hacer el elogio de los hombres de bien,
de la serie de nuestros antepasados: 

10No así los hombres de bien:
su esperanza no se acabó,
 

11 sus bienes perduran en su descendencia,
su heredad pasa de hijos a nietos.
12Sus hijos siguen fieles a la alianza,

y también sus nietos, gracias a ellos.
13Su recuerdo dura por siempre,

su caridad no se olvidará.
14SepuItados sus cuerpos en paz,
vive su fama por generaciones; 
15el pueblo cuenta su sabiduría,
la asamblea pregona su alabanza.

Explicación.


44,1-15 Una introducción general prepara el desfile histórico. El autor piensa probablemente en personajes concretos: en Salomón y Ezequías, los soberanos, en Elías, el vidente, en José, el príncipe, en Isaías, el consejero, en David y Asaf, los compositores, en Salomón y los empleados de Ezequías, los poetas, etcétera. La enumeración genérica quiere abarcar otras figuras. La división estrófica es hipotética.

44,1 El término "de bien" es el clásico hsd: hombres que han recibido de Dios la bondad o misericordia, y la ejercitan con los demás. Lo cual significa ya una selección en la mente del autor: bienhechores. Además los considera en su categoría de "antepasados", con fuerte expresión de continuidad y pertenencia: casi tradición biológica.


44,10-15 Repite la fórmula del verso primero. La continuidad de las generaciones y la del recuerdo forman la tradición de Israel. El recuerdo hace presentes y actuales los antepasados, como los descendientes hacen presente una estirpe. El recuerdo está ligado a la caridad, según la convicción del autor, Eclo 40,17; Sal 112: es la práctica de la "misericordia" que encabeza el fragmento. Pero el hombre no sobrevive, sólo perdura su fama: compárese con Eclo 39,9-11. 
SALMO. 132,11.13-14.17-18.

11EI Señor juró a David
una promesa que no retractará:
«Un fruto de tus entrañas
colocaré en tu trono. 
13EI Señor ha elegido a Sión,
la quiere como residencia suya:
14«Éste es mi descanso para siempre,
aquí  habitaré, porque la quiero.  
17Haré brotar un cuerno a David,
preparo una lámpara para mi Ungido.
18Vestiré de ignominia a sus enemigos;
sobre él florecerá su diadema».
Explicación.
132,11 a El verso es enfático. En tiempo del Cronista es una magnífica profesión de fe y esperanza.
132,11 b-12 El primero en singular sin condiciones. El segundo en plural y condicionado: Sal 89,29-38.
132,13 Elección de Sión: Sal 68,17; 87,2. 
132,17 -18 Los verbos "brotar, florecer” vienen del campo vegetal. Tanto el cuerno como la lámpara parecen designar al sucesor.

Trasposición cristiana.
Éste es uno de los salmos mesiánicos clásicos: se incorpora a la serie de 2, 45, 72, 110. El NT lo cita en Hch 2,29 y 7,45-47. El cristiano como morada del
Padre y del Hijo: Jn 14,23. Los Padres han referido el v. 8 a la resurrección y ascensión de Jesucristo. 

 EVANGELIO. Mateo 13,16-17.
16 ¡Dichosos, en cambio, vuestros ojos porque ven y vuestros oídos porque oyen!
17 Pues os aseguro que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis vosotros, y no lo vieron, y oír lo que oís vosotros, y no lo oyeron.

EXPLICACIÓN.
Los discípulos deben saber apreciar su circunstancia (16).

LECTURAS DEL VIERNES 25 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. 2 Corintios 4,7-15.

7Pero este tesoro lo llevamos en vasijas de barro, para que se vea que esa fuerza tan extraordinaria es de Dios y no viene de nosotros. 8Nos aprietan por todos lados, pero no nos aplasta; 9estamos apurados, pero no desesperados; acosados, pero no abandonados; 10nos derriban, pero no nos rematan; paseamos continuamente en nuestro cuerpo el suplicio de Jesús, para que también la vida de Jesús se transparente en nuestro cuerpo; 11es decir, que a nosotros que tenemos la vida, continuamente nos entregan a la muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se transparente en nuestra carne mortal. 12Así la muerte actúa en nosotros y la vida en nosotros.
                 13Sin embargo, poseyendo el mismo espíritu de fe que se expresa en aquel texto de la Escritura: "Creo, por eso hablo" (Sal 116,10), también creemos nosotros y por eso hablamos, 14sabiendo que aquel que resucitó a Jesús nos resucitará también a nosotros con Jesús y nos colocará con nosotros a su lado. 15Y todo esto es por vosotros, de suerte que, al extenderse la gracia a más y más gente, multiplique la acción de gracias para gloria de Dios.

Explicación.

Son precisamente las tribulaciones y persecuciones que sufre, y que muestran su debilidad, las que prueban que Dios está con él. Vasijas de barro, posible alusión a Gn 2,7 (cf. Rom 9,21-23; 1 Cor 15,47) (7). Situaciones extremas que no logran impedir su actividad; es más, cuanto mayor es la persecución (el suplicio de Jesús), más efectiva es en él la vida de Jesús (8-11). La entrega a la muerte por amor es la que manifiesta y comunica la potencia de la vida (12).

               Cita de Sal 116,10 (LXX). La fe, que incluye la certeza de la resurrección, da fuerzas para proclamar el mensaje, a pesar de la oposición. Esta certeza es propia de todo cristiano, no sólo del apóstol (14). Las penalidades se aceptan para que los hombres conozcan la generosidad de Dios y lo alaben por ella (13-15).

SALMO. 126,1-6.

1Cuando cambió el Señor la suerte de Sión,
creíamos soñar;
2se nos llenaba de risas la boca,
la lengua de júbilo.
Hasta los paganos comentaban:
«El Señor ha estado grande con ellos».
3-EI Señor ha estado grande con nosotros,
y celebramos fiesta.
4Cambia, Señor, nuestra suerte,
como los cauces del Negueb.
5Los que siembran con lágrimas
cosechan con júbilo.
6AI ir iba llorando
llevando la bolsa de semilla;
al volver vuelve cantando
llevando sus gavillas.
 
Explicación.
126 Género y situación. Acción de gracias por una restauración y petición para que se complete. En la mayoría de los textos en que aparece la fórmula "cambiar la suerte", se refiere a la vuelta del destierro de Babilonia: Dt 30,3; ocho veces en el bloque Jr 29,14-33,26. Parece bastante probable que el salmo expresa el gozo por la vuelta del destierro en la primera repatriación, o en tiempo de Nehemías.
El gozo y el sueño. Tan grande es el gozo, que les parece un sueño. ¿Es pesimismo?: en la vida las dichas son sueño. ¿Es cautela?: por si acaso, no entregarse al gozo.
¿Realistas o soñadores? El salmo confiesa entre líneas que los soñadores tenían razón: como Isaías Segundo, como cuantos preparan los grandes cambios de la suerte.
Dos imágenes. a) Una lluvia torrencial puede llenar los cauces de torrentes y fertilizar algunas zonas de páramos (Job 38,25-27). Del mismo modo se llenarán los cauces de Judá con las corrientes de nuevos repatriados. b) Había años en que los labradores tenían que quitarse el pan de la boca para reservar simiente. Sembrar, aparte la fatiga del trabajo, era pasar hambre; pero no era estéril. Así la marcha al destierro, vista desde el retorno, no aparece estéril: fue siembra costosa para una cosecha gozosa. La palabra hebrea significa semilla vegetal y estirpe humana: Is 65,9; Jr 31,27; Os 2,25. 
126,1-2a Forma pareja con el 124 como faceta complementaria.
126,2b Los paganos han sido testigos de la acción del Señor a favor de su pueblo: Sal 98,2; Is 52,1.
126,5 Puede compararse con Is 9,2; Sal 4,8.
126,6 Léase Bar 5,5-6.9.

Trasposición cristiana.
 La resurrección de Cristo es el inaudito cambio de la suerte; tanto que los apóstoles, al ser testigos de ella, no acababan de creerlo. Su cuerpo muerto ha sido la semilla fecunda (Jn 12,24). Siembra y cosecha en Jn 4,36-38. 

EVANGELIO. Mateo 20,20-28.

PETICIÓN DE LOS ZEBEDEOS.                  

20 Entonces se acercó a Jesús la madre de los Zebedeos con sus hijos para rendirle homenaje y pedirle algo.
21 Él le preguntó:
                   - ¿Qué deseas?
                   Contestó ella:
                   - Dispón que cuando tú reines estos dos hijos míos se sienten uno a tu derecha y el otro a tu izquierda.
                  22 Pero Jesús replicó:
                  - No sabéis lo que pedís: ¿sois capaces de pasar el trago que voy a pasar yo?
                  Le contestaron:
                  - Sï, lo somos.
                  23 Él les dijo:
                  - Mi trago lo pasaréis, pero el sentarse a mi derecha o a mi izquierda no está en mi mano concederlo más que a aquellos a los que mi Padre se lo tenga preparado.
                  24 Los otros diez, que lo habían oído, se indignaron contra los dos hermanos.

INSTRUCCIÓN.

                  25 Jesús los reunió y les dijo:
                  - Sabéis que los jefes de las naciones las dominan y que los grandes les imponen su autoridad.
26 No será así entre vosotros; al contrario, el que quiera hacerse grande sea servidor vuestro
27 y el que quiera ser primero sea siervo vuestro.
28 Igual que el Hombre no ha venido para que le sirvan, sino para servir y para dar su vida en rescate por todos.

Explicación.

Tríptico: 20,20-34; 20,25-28; 20,29-34. La primera y la tercera unidad se corresponden, pues los dos ciegos son figura de los dos hermanos y, en general, de todos los discípulos. Unidad central, instrucción de Jesús: opone el dominio que se ejerce en la sociedad civil al servicio que debe practicarse en la comunidad.

                     La petición de la madre es la de los discípulos (22). Estos no pierden la esperanza de ver a Jesús como monarca y ambicionan los primeros puestos (21). Para participar de la verdadera realeza de Jesús hay que asociarse a su pasión y muerte (27,37). Pasar el trago, lit. "beber la copa", locución semítica que denota una prueba dolorosa (Is 51,17; Lam 4,21). "La copa" vuelve a aparecer en Getsemaní (26,39) y la ofrecerá Jesús a los suyos en la cena (26,27). Dispuestos a todo para lograr su propósito (22). Pasar por la misma prueba es parte del compromiso que hace el discípulo para seguir a Jesús (16,24). Quiénes son los primeros en el seguimiento lo conoce sólo el Padre (23). La mención de dos (21) y de diez (24) recuerda el cisma de Israel (1 Re 12).

                     Instrucción (25-28). El dominio y la tiranía son propios de los que no conocen a Dios (25; cf. 1 Sm 8,5). En la comunidad de Jesús, la grandeza o la primacía no derivan del dominio, sino del servicio (26s). Misión del Hombre (Jesús y los suyos): en la comunidad, ser servidor, no tener servidores; con la humanidad (todos), procurar su liberación del antiguo pueblo para legar a la tierra prometida, pero no con la violencia guerrera, sino con un amor dispuesto a dar la vida.

LECTURAS DEL JUEVES 24 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. Jermías 2,1-3.7-8.12-13.

1El Señor me dirigió la palabra:
2-Ve, grita, que lo oiga Jerusalén:
Así dice el Señor:
Recuerdo tu cariño de joven, tu amor de novia,
cuando me seguías por el desierto,
por tierra yerma.
3Israel era sagrada para el Señor,
primicia de su cosecha:
quien osaba comer de ella lo pagaba,
la desgracia caía sobre él -oráculo del Señor-.
7Yo os conduje a un país de huertos,
para que comieséis sus frutos sabrosos;
pero entrastéis y contaminasteis mi tierra,
hicistéis abominable mi heredad.
8Los sacerdotes no preguntaban:
¿Dónde está el Señor?
Los doctores de la Ley no me reconocían,
los pastores se rebelaban contra mí,
los profetas profetizaban en nombre de Baal,
siguiendo a dioses que de nada sirven.
12¡Espantaos, cielos, de ello,
horrorizaos y pasmaos!
-oráculo del Señor-,
13porque dos maldades ha cometido mi pueblo:
me abandonaron a mí, fuente de agua viva,
y se cavaron aljibes, aljibes agrietados
que no retienen el agua.

Explicación.

2,2 La capital personifica como matrona al pueblo entero. El primer amor, juvenil, se recuerda con añoranza (Prov 5,18). La etapa del desierto está idealizada en el recuerdo, como tiempo de ilusión y entrega.

2,3 Las primicias de las plantas se consagraban al Señor y eran sagradas (Lv 19,23-25): quien las come sin estar autorizado, comete sacrilegio y es castigado. Israel era, por la elección, primicia entre los pueblos.

2,7 Propone el contraste entre esterilidad y fertilidad. La tierra prometida es sagrada, como heredad del Señor; los israelitas la profanaron (Lv 8,24-28; Sal 106,37-39).

2,8 Cuaterna de personas responsables y culpables, que un día se volverán contra el profeta. Los sacerdotes (Jeremías es del gremio) "buscan" su provecho; los doctores interpretan la ley pervirtiéndola (Is 10,1s); los profetas venden sus servicios a divinidades falsas o inoperantes. Los mediadores de Dios han cortado la mediación.

2,12 Los cielos son testigos notariales de Dios en el pleito (Sal 50,4; Is 1,2); esta vez conmovidos por la insensatez del pueblo.

2,13 Agua viva, manante, no estancada, pernenne, no intermitente (15,18; Job 6,15; Sal 36,10).

SALMO. 36,6-11.

6 Señor, tu lealtad llega al cielo,
tu fidelidad hasta las nubes;
7 tu justicia es como las altas cordilleras,
tus juicios son un océano inmenso.
Tú socorres a hombres y animales
8 ¡qué inapreciable es tu lealtad, oh Dios!
Los humanos se acogen
a la sombra de tus alas,
9 se nutren de la enjundia de tu casa,
les das a beber del torrente de tus delicias;
10 porque en ti está la fuente viva
y a tu luz vemos la luz.
11 Prolonga tu lealtad con los que te reconocen
y tu justicia con los hombres sinceros.


Explicación.

36,6-10 Sin transición se presenta la visión de Dios. Si algunos datos son conocidos, la meditación sobre Dios es extraordinaria.

36,6-8a Las cualidades de Dios, lealtad, fidelidad y justicia, son exaltadas por sus dimensiones cósmicas. La grandeza sentida y no abarcada de lo espiritual la proyecta el poeta a dimensiones especiales, que funcionan como símbolos: véanse Sal 103,11s; Ef 3,18.

36,7a "Altas": tomando ´el como superlativo. ALternativa: "montañas de Dios / divinas" El "océano inmenso": véanse Sal 78,15; Am 7,6.

36,7b Las cualidades de Dios se ejercitan en una acción salvadora a favor de las criaturas vivas, como si el Creador cumpliera con ellas deberes de justicia. Una vez que ha dado vida, es fiel a sus exigencias: cfr. Sab 11,24s. La bina "honbres y animales" o ganado es frecuente: Gn 6,7; Lv 27,28; Ez 14,14 etc.

36,8 La exclamación puede clausurar lo que precede o introducir lo que sigue. La "lealtad" de Dios sirve de enlace.

36,8b-10 De la dilatada visión cósmica se recoge el orante a sus experiencias en el templo, trascendiendo los datos sensibles en un magnífico crescendo: el recinto es "la sombra de tus alas"; el banquete cúltico es "la enjundia de tu casa"; la copa es un torrente; el vino es delicia; y todo es "tuyo". En el templo entran sólo "los hijos de Adán". La "sombra de las alas" pueden tener carácter doméstico, acogedor.

36,9 "Delicias": la palabra hebrea nos trae a la memoria el Edén o paraíso, el parque regado por un manantial que se abre en cuatro brazos. En el templo se recobra de algún modo el paraíso perdido; compárese con Ez 47 y Jl 4,18. La frase es de feliz concisión: "torrente de delicias": sugiere el caudal que vivifica las plantas del parque delicioso. El manantial del torrente se encuentra en Dios.

36,10 Dios es también fuente de luz que ilumina a todo hombre: ver la luz equivale a vivir. La expresión hebrea es más sugestiva que lógica: como si una luz superior y total iluminase los ojos para hacerlos capaces de ver su luz. Cada uno participa de una vida = luz que lo trasciende.

¿Quién pronuncia el último verso en primera persona del plural? Contextualmente serían "los humanos"; culturalmente serían los israelitas que tienen acceso al templo. El salmo queda abierto y disponible. Un grupo de fieles, a través de su experiencia comunitaria, hablan en nombre de la humanidad; lo que ellos viven en el templo lo pueden vivir todos los humanos sin límites espaciales.

36,11-13 Casi como apéndice se añaden tres versos de súplica. El imperativo marca el cambio de dirección. "Prolongar la lealtad": véase el magnífico anuncio de Jr 31,3.

TRANSPOSICIÓN CRISTIANA.Pablo cita parte del v.2 en Rom 3,18, en el cuadro del pecado universal. Los símbolos de la segunda parte permanecen o renacen en el NT. Mt 23,37 menciona las alas protectoras. En el evangelio de Juan; el agua de la samaritana (Jn 4), del Espíritu (7,37-39), de la entrega final (19,34). También la luz: 1,4; 8,12; 9,5; 12,36. Agua y luz alcanzan su plenitud en Ap 22,1-3. 


EVANGELIO. Mateo 13,10-17.

    10 Se le acercaron los discípulos y le preguntaron:
                   - ¿Por qué razón les hablas en parábolas?
                   11 Él les contestó:
                   - A vosotros se os han dado a conocer los secretos de reinado de Dios; a ellos, en cambio, no se les han dado;
12 y al que produce se le dará hasta que le sobre, mientras al que no produce se le quitará hasta lo que ha recibido.
13 Por esa razón les hablo en parábolas, porque miran sin ver y escuchan sin oír ni entender.
14 Se cumple en ellos la profecía de Isaías:


                 Por mucho que oigáis no entenderéis,
                 por mucho que veáis no percibiréis:
                 15 Porque está embotada la mente de este pueblo;
                 son duros de oído, han cerrado los ojos
                 para no ver con los ojos ni oír con los oídos
                 ni entender con la mente
                 ni convertirse
                 para que yo los cure (Is 6,9-10).

                 16 ¡Dichosos, en cambio, vuestros ojos porque ven y vuestros oídos porque oyen!
17 Pues os aseguro que muchos profetas y justos desearon ver lo que veis vosotros, y no lo vieron, y oír lo que oís vosotros, y no lo oyeron.

EXPLICACIÓN.

10 - 17.       Aparte con los discípulos. No ven la razón de hablar en parábolas; piensan que el mensaje es accesible a todos. Respuesta de Jesús: ellos, por su convivencia con él, han podido conocer lo que implica el reinado de Dios (universalidad, cese del privilegio e instituciones de Israel, señorío del hombre sobre la Ley), mientras las multitudes siguen aferradas al espiritu nacionalista. Eso las incapacita: se requiere una ruptura con esa ideología para entender el mensaje (11). Al que produce (lit. "al que tiene"), forma dinámica en vez de la estático-resultativa (cf. 16,7.8; 25,29); paralelamente, al que no produce, lo que ha recibido (12). Los discípulos deben saber apreciar su circunstancia (16).

LECTURAS DEL MIÉRCOLES 23 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. Jermías 1,1.4-10

1Palabras de Jeremías, hijo de Jelcías, de los sacerdotes residentes en Ananot, territorio de Benjamín.
4El Señor me dirigió la palabra:
5-Antes de formarte en el vientre te escogí, antes de salir del seno materno te consagré y te nombré profeta de los paganos.
6Yo repuse:
-¡Ay Señor mío! Mira que no sé hablar, que soy un muchacho.
7El Señor me contestó:
-No digas que eres un muchacho: que a donde yo te envíe; irás; lo que yo te mande, lo dirás. 8No les tengas miedo, que yo estoy contigo para librarte -oráculo del Señor-.
9El Señor extendió la mano, me tocó la boca y me dijo:
10-Mira, yo pongo mis palabras en tu boca, hoy te establezco sobre pueblos y reyes, para arrancar y arrasar, destruir y demoler, edificar y plantar.

Explicación.

1,4-10 La vocación incluye elección, consagración y nombramiento. La elección precede a la existencia, como si la fundase (cfr. Is 49,5; Lc 1,41s; Gal 1,15s). Si la vocación funda la existencia, un día la misión podrá consumir la existencia. Consagrar es apropiarse algo para una tarea sacra. La vocación profética es más sagrada que la sacerdotal (cfr. Dt 17-18). El nombramiento tiene dimensión universal: desborda los límites de la patria, aunque se centre en ella. ¿Qué decir del alcance universal de Jr en nuestra historia?

1,6-8 La objeción del llamado es reacción frecuente: Moisés Éx 4,10; 6,12; Jue 6,15. Expresa el temor que engendra lo vasto y difícil de la empresa. Alega incapacidad de lenguaje; pero Jeremías fue magnífico poeta y orador. El Señor responde con un imperativo categórico: habrá de ir como enviado y hablar en nombre de Dios. La garantía se promete en una forma escueta: quien lleva como nombre un sumple "Soy", se hará sentir como un "Soy contigo". Veremos de qué modo tan paradójico se realizará.

1,9-10 La consagración, casi sacramental, incluye el gesto y el texto. Dios no da al profeta las palabras, el mensaje hecho, sino que moverá y guiará desde dentro su actividad literaria. Como divina, la palabra será poderosa: lo dicen en la imagen de dos actividades fundamentales del hombre antiguo: vida agrícola y vida urbana (18,9; 31,28; 42,10; 1 Cor 3,9).

SALMO. 71,1-6.15.17.

1A ti, Señor, me acojo:
que no fracase yo para siempre.
2Por tu justicia líbrame y ponme a salvo,
préstame oído y sálvame.

3Sé tú mi roca de morada, siempre accesible,
pues mandaste salvarme.

Mi peña y mi alcázar eres tú.
4Dios mío, líbrame de la mano perversa,
del puño criminal y violento;

5porque tú, mi Señor, fuiste mi esperanza
y mi confianza, Señor, desde mi juventud.
6Nada más nacer me apoyaba en ti,

del vientre materno tú me sacaste.
Para ti mi alabanza continua.
15Mi boca explicará tu justicia
y tu salvación todo el día.
Aunque no soy experto en contar,  

17Me enseñaste, Dios, desde la juventud
y hasta hoy relato tus maravillas. 


Explicación.

71,1-8. El orante acumula títulos de Dios, tradicionales o modificados: roca accesible, peña y alcázar; y la terna refugio, esperanza y confianza. Empieza su oración copiando o evocando; su espiritualidad se ha formado en los salmos.
 71,1 Su vida hasta ahora no ha sido fracaso; pero si los enemigos lo privan de la etapa y tarea pendientes, una parte de su vida se habrá malogrado.

71,2 Con cuatro imperativos apela a la justicia de Dios, como víctima inocente ante el juez o el gobernante.
71,3 "Roca de morada" es paradójico; supone el cambio de una consonante respecto a 31,3. Pero, contando con Is 33,16, no intento armonizarlos.

71,5 El primer salto es a la juventud: uso frecuente: 1 Re 18,12; Jr 3,24s; Ez 4,14 etc. Puede ser el tiempo en que se independiza, escoge oficio, se desposa.
71,6 De la juventud salta al nacimiento. Ahora le consta que Dios estaba allí, casi como comadrona: Ex 22,10s. Es dudoso el significado de la palabra que traduzco por
"sacaste". 


71,15b-16 Caben dos interpretaciones, que afectan al término sprwt y al vínculo sintáctico. a) En la línea de número, parafraseo: "me pasaré el día contando, porque para mí no tiene cuento. Entraré ... ": compárese con Sal 139,17s; Eclo 43,28.30. b) En la línea de instrucción, sea conocimiento de libros escritos, sea habilidad en el arte de contar (Eclo 38,24; 44,4); unido a lo que sigue como concesiva. Parafraseo: "aunque no entiendo de letras / no soy experto en narrar, con la fortaleza del Señor entraré ... ". En la segunda interpretación el orante confiesa no pertenecer al gremio de los doctos; pero "fortalecido" por Dios se atreve: cfr. Miq 3,8.

71,17-19 El anciano debilitado se fija en la ''fuerza'' de su Dios; una fuerza ordenada toda a la justicia, una justicia que supera toda dimensión humana. "¿Quién como tú?": Ex 15,11; Sal 35,10; 89,79. 


Trasposición cristiana.
Algunos Padres ponen el salmo en boca de Cristo, tomando vejez por debilidad. Retienen referencias al nacimiento, la instrucción celeste, las tribulaciones, la resurrección.  

EVANGELIO. Mateo 13,1-9.

1 Aquel día salió Jesús de casa y se sentó junto al mar.
2 Se congregaron alrededor de él grandes multitudes; él entonces se subió a una barca y se quedó sentado allí; toda la multitud se quedó en la playa.
3 Les habló de muchas cosas en parábolas:
                      - Salió el sembrador a sembrar.
4 Al sembrar, unos granos cayeron junto al camino; vinieron los pájaros y se los comieron.
5 Otros cayeron en terreno rocoso, donde apenas tenían tierra; como la tierra no era profunda, brotaron en seguida;
6 pero en cuanto salió el sol se abrasaron y, por falta de raíz, se secaron.
7 Otros cayeron entre zarzas; las zarzas crecieron y los ahogaron.
8 Otros cayeron en tierra buena y fueron dando fruto: unos, ciento; otros, sesenta; otros treinta.
9 ¡Quien tenga oídos, que escuche!

EXPLICACIÓN.

1 - 9.           Mt relaciona el discurso con los episodios anteriores (aquel día). La casa, el círculo de los discípulos. El lago/mar, frontera con los pueblos paganos (4,18). Jesús se sitúa en la barca, entre Israel y los paganos.

LECTURAS DEL MARTES 22 DE JULIO DEL 2014.

PRIMERA LECTURA. Miqueas 7,14-15.18-20.

14-Pastorea a tu pueblo con el cayado,
a las ovejas de tu propiedad, vecino solitario
de la foresta del Carmelo;
que pasten como antaño en Basán y Galaad;
15Como cuando saliste de Egipto,
muéstranos tus prodigios.
18-¿Qué Dios como tú perdona el pecado
y absuelve la culpa al resto de su heredad?
No mantendrá siempre la ira,
pues ama la misericordia;
19volverá a compadecerse,
destruirá nuestras culpas,
arrojará al fondo del mar
todos nuestros pecados.
20Así serás fiel a Jacob y leal a Abrahán,
como lo prometiste en el pasado
a nuestros padres.

Explicación.

7,14 "Vecino solitario": semejante título no tiene antecedentes ni iguales en el AT, por lo que algunos lo atribuyen al rebaño. Tampoco es extraño imaginar a las divinidades residiendo en las montañas. Por otra parte, Carmelo puede ser topónimo genérico (1 Sm 25,2), y sabemos que el arca estuvo estacionada en Quiriat Yearim = Villasotos (Sal 132).

7,18-20 Cuarta parte. Por el tema del pecado y del perdón, la última parte empalma con la primera. Si al enemigo se revela el Señor poderoso castigando, a su pueblo se revela misericordioso perdonanado.

7,19 Véanse Sal 32,1; 103,12. En el fondo del mar desaparece.

7,20 La lealtad del Señor se muestra perdonando: la última, la insuperable. La esperanza se basa en la promesa, una promesa que el pecado no puede invalidar.

SALMO. 85,2-8.

2Señor, has sido bueno con tu tierra,
has cambiado la suerte de Jacob;
3has perdonado la culpa de tu pueblo,
has cubierto todos sus pecados.
4Has reprimido tu cólera,

te has retraído de tu ira encendida.
5Restáuranos, Dios salvador nuestro,
calma tu enojo con nosotros.


6¿Vas a estar siempre indignado con nosotros
o a prolongar tu ira de edad en edad?
7¿No vas a devolvemos la vida,
para que tu pueblo te festeje?
8Demuéstranos, Señor, tu lealtad
y danos tu salvación.  
Explicación.
85,2 Comienza de repente, con un acto de benevolencia divina: negando la negativa de tantos profetas, como Jr 14,10.12; Os 8,13; Am 5,22; Miq 6,7. "Cambiar la suerte": siete veces en Jr 30-33; Ez 39,25; Sal 53,7 etc.
85,3-4 El cambio implica remover las causas profundas del desastre: ese engranaje exigido de pecado humano y cólera divina. Toma la iniciativa Dios y actúa en cuatro verbos decisivos. El hombre le dice a Dios lo que Dios sabe mejor: no informa, sino confiesa.
85,6 La pregunta retórica expresa impaciencia: es imposible que tal actitud de Dios sea definitiva: compárese con 74,1; 77,8-10; 79,5. La situación actual parece una vuelta al desastre, a la ira de Dios.
85,7 La nueva pregunta retórica enuncia la "conversión" de Dios, que nos hará "revivir": Sal 71,20; 80,19; 138,7. La vida recobrada desemboca en una celebración del Señor, pues sólo los vivos lo alaban. 
85,8 En el contexto implícito de alianza, invocan la "lealtad" de la otra parte, de Dios.

EVANGELIO. Juan 20,1-2.11-18.

1. El primer día de la semana, por la mañana temprano, todavía en tinieblas fue María Magdalena al sepulcro y vio la losa quitada.
2. Fue entonces corriendo a ver a Simón Pedro y también al otro discípulo, el predilecto de Jesús, y les dijo:
- Se han llevado al Señor del Sepulcro y no sabemos dónde lo han puesto.

11. María se había quedado junto al sepulcro, fuera, llorando. Sin dejar de sllorar, se asomó al sepulcro
12. y vio dos ángeles vestidos de blanco sentados uno a la cabecera y otro a los pies, en el lugar donde había estado puesto el cuerpo de Jesús.
13. Le preguntaron ellos:
- Mujer, ¿por qué lloras?
Les dijo:
- Se han llevado a mi Señor y no sé donde lo han puesto.
14. Dicho esto, se volvió hacia atrás y vio a Jesús de pie, pero no sabía que era Jesús.
15. Jesús le preguntó:
- Mujer, ¿por qué lloras?, ¿a quién buscas?
Ella, pensando que era el hortelano, le dice:
- Señor, si te lo has llevado tú, dime dónde lo has puesto y yo me lo llevaré.
16. Le dice Jesús:
-María.
Volviéndose ella, le dijo en su lengua:
-Rabbuni (que equivale a “Maestro”).
17. Le dijo Jesús:
-Suéltame, que aún no he subido con el Padre para quedarme. En cambio, ve a decirles a mis hermanos: “Subo a mi Padre, que es vuestro Padre, mi Dios y vuestro Dios”.
18. María fue anunciando a los discípulos:
-He visto al Señor en persona, y me ha dicho esto y esto.


EXPLICACIÓN.

Terminada la creación (19,30) y preparada la verdadera Pascua (19,31-42), comienza sin interrupción el nuevo ciclo: el de la creación nueva y la Pascua definitiva. Prescinde Jn del dato cronológico exacto, para subrayar que el tiempo mesiánico sigue inmediatamente a la muerte de Jesús. “El último día” de la cruz viene representado ahora como el primer día (1), que abre el tiempo nuevo. Por la mañana temprano indica un momento en que ya hay luz (18,28); dato inconciliable con todavía en tinieblas; pero en Jn la tiniebla designa la ideología contraria a la verdad de la vida (1,5; 3,19; 6,17; 12,35). María va al sepulcro creyendo que la muerte ha triunfado; espera encontrar el cadáver de Jesús. Alusión al Cantar 3,1, de la esposa: “lo busqué y no lo encontré”. La losa puesta habría sido el sello de la muerte definitiva (cf. 11,38s.41), pero la historia de Jesús no se ha cerrado. Alarma de María (2).

11-18. Jesús había anunciado a los suyos la tristeza por su muerte, pero asegurándoles la brevedad de la prueba y la alegría que les produciría su vuelta (16,16-23a). María, en cambio, llora sin esperanza (xf. 11,33) (11); ha olvidado las palabras de Jesús. No se separa del sepulcro, donde no puede encontrarlo.

Los guardianes del lecho (dos ángeles) (12) son los testigos de la resurrección y están dispuestos a anunciarla. Blanco, color de la gloria divina; su presencia es un anuncio de vida. El vestido y la pregunta de los ángeles (13) muestran que no hay razón para el llanto. Mujer, apelativo usado por Jesús con su madre (2,4 y 19,6), la esposa fiel de Dios en la antigua alianza, y con la samaritana (4,21), la esposa fiel. Los ángeles ven en María a la esposa de la nueva alianza, que busca desolada al esposo, pensando haberlo perdido. Respuesta de María: como la primera vez que llegó al sepulcro (20,2), sigue pensando que todo ha terminado con la muerte.

Mientras siga mirando al sepulcro no encontrará a Jesús. En cuanto se vuelve (14), lo ve de pie, como una persona viva, pero la idea de la muerte la domina y no lo reconoce. La pregunta de Jesús (15) repite en primer lugar la de los ángeles: no hay motivo para llorar. Añade ¿A quién buscáis?, como en el prendimiento (18, 4.7), para darse a conocer. Pero María no pronuncia su nombre. Hortelano: vuelve la idea del huerto/jardín, según el lenguaje del Cantar (19,41). Se prepara el encuentro de la esposa (Mujer) con el esposo (3,29). María, obsesionada con su idea, piensa que la ausencia de Jesús se debe a la acción de otros (si te lo has llevado tú).
Jesús la llama por su nombre (16) y ella reconoce su voz (10,3; cf. Cant 5,2). Se vuelve del todo, sin mirar más al sepulcro, que es el pasado. Al esposo responde la esposa (cf. Jr 33,11; Jn 3,29): se establece la nueva alianza por medio del Mesías. Rabbani, “señor mío”, tratamiento de los maestros, pero también de la mujer dirigiéndose al marido. El lenguaje nupcial expresa la relación de amor y fidelidad que une la comunidad a Jesús; pero este amor se concibe en términos de discipulado, es decir, de seguimiento.

Gesto implícito de María (Cant 3,4: “Encontré el amor de mi alma; lo agarré y ya no lo soltaré”). La alegría del encuentro hace olvidar a María que su respuesta a Jesús ha de ser el amor a los demás. A ese gesto responde Jesús al decirle: Suéltame. Da la razón (aún no he subido, etc.). La fiesta nupcial será el estadio último, cuando la esposa, la humanidad nueva, haya recorrido su camino, el del amor total, y la creación queda perfectamente realizada.
Jesús envía a María con un mensaje para los discípulos, a los que por primera vez llama sus hermanos: amor fraterno, comunidad de iguales. Antes de la subida definitiva de Jesús al Padre (para quedarme), junto con la humanidad nueva, hay otra subida que dará comienzo a la nueva historia. Volverá con los discípulos (14,18). La mención de Padre de Jesús como Padre de los discípulos responde a la promesa de 14,2-3: “En el hogar de mi Padre hay vivienda para muchos, etc”. Jesús sube ahora para dar a los suyos la condición de hijos (mis hermanos), mediante la infusión de su Espíritu (14,16s). Esta experiencia les hará conocer a Dios como Padre (17,3); será su primera experiencia verdadera de Dios. No van a llamar Padre al que conocen como Dios, sino al contrario: llamarán Dios al que experimentan como Padre. No reconocen a otro Dios más que al que ha manifestado en la cruz de Jesús su amor gratuito y generoso por el hombre, comunicándole su propia vida. Es el único Dios verdadero (17,3). La comunidad recibe la noticia de la resurrección de Jesús (18).

SÍNTESIS.

Jn concibe la obra de Jesús como la creación de una humanidad y un mundo nuevos. En paralelo con la pareja primordial, Adán y Eva, aparece en el huerto/jardín la nueva pareja que da origen a la humanidad nueva. La presencia de Jesús en la comunidad no absorbe las energías de ésta, sino que la proyecta hacia fuera, enviándola a la misión.