Primera Lectura. Job 38,1.12-21; 40,3-5.
381Entonces el Señor respondió a Job
desde la tormenta:
12¿Has mandado en tu vida a la mañana
o has señalado su puesto a la aurora
13para que agarre la tierra por los bordes
y sacuda de ella a los malvados,
14para que le dé forma como el sello a la arcilla
y la tiña como la ropa,
15para que se les niegue su luz a los malvados
y se quiebre el brazo sublevado?
16¿Has entrado por los hontanares del mar
o paseado por la hondura del océano?
17¿Te han enseñado las puertas de la Muerte
o has visto los portales de las Sombras?
18¿Has examinado la anchura de la tierra?
Cuéntamelo, si lo sabes todo.
19¿Por dónde se va a la casa de la luz
y dónde viven las tinieblas?
20¿Podrías conducirlas a su país
o enseñarles el camino de casa?
21Lo sabrás, pues ya habías nacido entonces
y has cumplido tantísimos años.
403Job respondió al Señor:
4Me siento pequeño, ¿qué replicaré",
me taparé la boca con la mano.
5He hablado una vez y no insistiré;
dos veces y no añadiré nada.
Explicación.
38,1 La aparición en una teofanía es un modo solemne. El tema, sobre todo en forma de tormenta, es común en salmos y profetas: p. ej. Sal 18,8-14; 50,3 pleito con el pueblo; 76; 77,17-21; 83,16; 97,2-5. La teofanía presente se ordena al discurso. La respuesta de Dios ha sido una obsesión a lo largo de la discusión: por fin Dios "responde".
38,12-15 La aurora es recreadora del mundo: como un pastor que sacude su manto para espulgarlo, como un artesano que graba formas en la arcilla, como un teñidor que colorea los paños.
38,12 Sal 101,8; 104,22.
38,13-15 Recuérdense los habitantes de las tinieblas descritos por Job, 24,13-17; la luz universal y generosa de la aurora no es la de ellos. Corre un paralelismo entre el océano desmandado, la tiniebla nocturna, los malvados.
38,16-18 Como un viaje cósmico del que uno informa al volver; es la misma imagen que Eclo 24 aplica a la sabiduría.
38,16 Se trata del océano subterráneo: Gn 7,11; 49,25; Dt 33,13. Bajo él se encuentra el mundo de los muertos, 26,5.
38,19-20 Continúa la imagen del viaje cósmico. Luz y tinieblas son como dos personajes que se retiran alternativamente a su morada; lo mismo que hombres y animales en Sal 104,20-23.
38,21 La sabiduría es proporcional a la edad, sólo la sabiduría primordial abarca todo el saber del cosmos: Prov 8; Eclo 1; 24. Véase también 15,7.
40,1-5 Job pedía un pleito con Dios, y se lo han concedido: los términos censor, crítico tienen referencia forense: fiscal, parte, acusador. Job había pedido respuesta a Dios, ahora Dios retuerce la posición y pide respuesta a Job: entra en las reglas del pleito, el que acusa se expone; que la crítica sea responsable. Job pedía una sentencia, que todavía no llega. Job se siente sobrecogido (13,11), consciente de que Dios está por encima de toda crítica, y decide no insistir, contento con la media victoria ganada, hacer hablar a Dios. A estas alturas, Dios no acepta la retirada; le queda algo importante que decir.
Salmo. 139,1-3.7-10.13-14.
1Señor, tú me sondeas y me conoces.
2Me conoces cuando me siento
o me levanto,
de lejos percibes mis pensamientos.
3Disciernes mi camino y mi descanso,
todas mis sendas te son familiares.
7¿Adónde me alejaré de tu aliento?,
¿adónde huiré de tu presencia?
8Si escalo el cielo, allí estás tú;
si me acuesto en el abismo, ahí estás.
9Si me traslado al ruedo de la aurora
o me instalo en el confín del mar,
10allí se apoya en mí tu izquierda
y me agarra tu derecha.
13Tú has creado mis entrañas
me has tejido en el seno materno.
14Te doy gracias
porque te has distinguido con portentos
y son maravillosas tus obras.
Conoces perfectamente mi aliento.
Explicación.
139,1 "Sondeas": véanse Jr 17,10; Sal 44,22; Job 28,27.
139,2 Compárense las polaridades con las de Dt 6,7; Is 37,28s.
139,7 El "aliento" esta imaginado en su emisión vital, no como el de Gn 1: cfr. Sal 63,9. El "rostro" sugiere la manifestación inmediata, la presencia próxima: cfr. Sal 51,12. "Huida" como la de Jonás.
139,8 Cielo y abismo son dos lugares extremos, en los que se halla la pura presencia invariable de Dios: Am 9,2s. Imagina el seol como inmenso dormitorio donde el hombre tiende su lecho: Job 17,13; 21,26. La presencia del Señor en el seol contradice las creencias de Mesopotamia y algunas concepciones bíblicas que declaran a Yhwh extraño al mundo de los muertos: véase Eclo 16,18s.
139,9 La palabra hebrea significa alas, ruedo de un manto, haldas de un vestido; el ruedo es más apto para imaginar la aurora. "El mar", se entiende el Mediterráneo.
139, 14ab (Adelanto la explicación de este difícil verso). La interpretación varía según se lea primera (texto masorético) o segunda persona, según se reduzca al verbo plh o a pl Alternativas: de modo portentoso he sido distinguido; con tus portentos te has distinguido; soy / eres prodigioso. Hace sentido como conclusión de la segunda sección.
139,13.14c.15.16 Ordeno los versos guiado por el paralelismo. Distingo dos unidades: el organismo y el destino. Del organismo menciona riñones, aliento y huesos; el destino es el curso de los días, conocido o fijado desde el comienzo.
139,13 "Riñones": sede de pasiones, con frecuencia unidos a corazón.
139,14c Forma buen paralelismo con la primera frase de 15: "aliento / huesos", "conoces perfectamente / no se te oculta".
Evangelio. Lucas 10,13-16.
13 ¡Ay de ti, Corozaín; ay de ti, Betsaida! Porque si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho las potentes obras que en vosotras, hace tiempo que se habrían arrepentido vefstidas de saco y sentadas en ceniza.
14 Por eso, el juicio le será más llevadero a Tiro y a Sidón que a vosotras.
15 Y tú, Cafarnaún, ¿piensas encumbrarte hasta el cielo? Bajarás al abismo.
16 Quien os escucha a vosotros, me escucha a mí; quien os rechaza a vosotros, me rechaza a mí; y quien me rechaza a mí, rechaza al que me ha enviado.
EXPLICACIÓN.
Tres ciudades galileas (representan a toda la región) que han rechazado a Jesús. Peor que los paganos, que habrían respondido a su actividad (13s). Ruina de Cafarnaún comparada a la del rey de Babilonia (Is 14,13.15) (15). La identidad de mensaje hace que los enviados representen a Jesús (cf. 9,48; no se ha afirmado de los Doce). Galilea ha rechazado a Jesús, Samaría (primicia del mundo pagano) va a escuchar (16).